POESIA  



Inmarcesible
Columna por un Momento

FUTURO

iNVICTUS

REDONDILLAS

VIEJA CIUDAD DE HIERRO

Beijing, Relámpago del mundo


Estoy triste
Trágica Nochevieja en Bangkok

EL APARECIDO
Reaparece el subcomandante Marcos

ESPERANDO A LOS BÁRBAROS
Culpables de las tragedias mundiales


TRAMPA

Los Estados Unidos de América, nosotros...

El presidente electo de los Estados Unidos, Barack Obama, es fotografiado a bordo del tren en que realizará parte del histórico recorrido del ex presidente Abraham Lincoln; en Washington ya lo espera una multitud

ODA AL OBRERO

TE AMO

El único defecto
en la mujer!

Padre Nuestro

Calaveras y Diablitos



PETICIONES

 
Un año más sus pasos apresura...
22 de diciembre de 2014





1955

Un año más sus pasos apresura;
un año más nos une y nos separa;
un año más su término declara
y un año más sus límites augura.

Un año más diluye su amargura;
un año más sus dones nos depara;
un año más, que con justicia avara
meció una cuna, abrió una sepultura.

¡Oh! dulce amigo, cuya mano clara
en cifra de cariño y de ternura
la mía tantas veces estrechara!

Un año más el vínculo asegura
de su noble amistad, alta y preclara.
¡Dios se lo otorgue lleno de ventura!

Salvador Novo.

A los hombre futuros, de Poesías escritas durante el exilio
27 de novimbre de 2014

 I            
Verdaderamente, vivo en tiempos sombríos.  
Es insensata la palabra ingenua. Una frente lisa              
revela insensibilidad. El que ríe
es que no ha oído aún la noticia terrible,            
aún no le ha llegado.    

¡Qué tiempos éstos en que      
hablar sobre árboles es casi un crimen 
porque supone callar sobre tantas alevosías!   
Ese hombre que va tranquilamente por la calle               
¿lo encontrarán sus amigos       
cuando lo necesiten?   

Es cierto que aún me gano la vida          
Pero, creedme. es pura casualidad. Nada          
de lo que hago me da derecho a hartarme.       
Por casualidad me he librado. (Si mi suerte acabara,     
[estaría perdido).           
Me dicen: «¡Come y bebe! ¡Goza de lo que tienes!»   
Pero ¿cómo puedo comer y beber        
si al hambriento le quito lo que como   
y mi vaso de agua le hace falta al sediento?      
Y, sin embargo, como y bebo.  

Me gustaría ser sabio también.               
Los viejos libros explican la sabiduría:   
apartarse de las luchas del mundo y transcurrir               
sin inquietudes nuestro breve tiempo.               
Librarse de la violencia.               
dar bien por mal,            
no satisfacer los deseos y hasta              
olvidarlos: tal es la sabiduría.    
Pero yo no puedo hacer nada de esto:
verdaderamente, vivo en tiempos sombríos.   

II            

Llegué a las ciudades en tiempos del desorden,             
cuando el hambre reinaba.       
Me mezclé entre los hombres en tiempos de rebeldía
y me rebelé con ellos.  
Así pasé el tiempo         
que me fue concedido en la tierra.        
Mi pan lo comí entre batalla y batalla.  
Entre los asesinos dormí.           
Hice el amor sin prestarle atención        
y contemplé la naturaleza con impaciencia.       
Así pasé el tiempo         
que me fue concedido en la tierra.        

En mis tiempos, las calles desembocaban en pantanos.              
La palabra me traicionaba al verdugo.  
Poco podía yo. Y los poderosos               
se sentían más tranquilos, sin mí. Lo sabía.        
Así pasé el tiempo         
que me fue concedido en la tierra.        

Escasas eran las fuerzas. La meta           
estaba muy lejos aún.  
Ya se podía ver claramente, aunque para mí     
fuera casi inalcanzable.
Así pasé el tiempo         
que me fue concedido en la tierra.        

III           

Vosotros, que surgiréis del marasmo   
en el que nosotros nos hemos hundido,            
cuando habléis de nuestras debilidades,            
pensad también en los tiempos sombríos          
de los que os habéis escapado.               

Cambiábamos de país como de zapatos              
a través de las guerras de clases, y nos desesperábamos           
donde sólo había injusticia y nadie se alzaba contra ella.             
Y, sin embargo, sabíamos           
que también el odio contra la bajeza    
desfigura la cara.            
También la ira contra la injusticia            
pone ronca la voz. Desgraciadamente, nosotros,           
que queríamos preparar el camino para la amabilidad  
no pudimos ser amables.           
Pero vosotros, cuando lleguen los tiempos       
en que el hombre sea amigo del hombre,         
pensad en nosotros      
con indulgencia. "
Bertolt Brecht

 

CUMPLEAÑOS DE AMOR
11 de novimbre de 2014

Carlos Fuentes cumpliría el 11 de noviembre 85 años de vida

¿Cómo seré yo
cuando no sea yo?
Cuando el tiempo
haya modificado mi estructura,
y mi cuerpo sea otro,
otra mi sangre,
otros mis ojos y otros mis cabellos.
Pensaré en ti, tal vez.
Seguramente,
mis sucesivos cuerpos
—prolongándome, vivo, hacia la muerte—
se pasarán de mano en mano,
de corazón a corazón,
de carne a carne,
el elemento misterioso
que determina mi tristeza
cuando te vas,
que me impulsa a buscarte ciegamente,
que me lleva a tu lado
sin remedio:
lo que la gente llama amor, en suma.
Y los ojos
—qué importa que no sean estos ojos—
te seguirán a donde vayas, fieles.

Ángel González


SÉ TODOS LOS CUENTOS
06 de novim bre de 2014

Panorama, conversación (1986).
Juan Genovés

Yo no sé muchas cosas, es verdad.
Digo tan sólo lo que he visto.
Y he visto:

que la cuna del hombre la mecen con cuentos,
que los gritos de angustia del hombre los ahogan con cuentos,
que el llanto del hombre lo taponan con cuentos,
que los huesos del hombre los entierran con cuentos,
y que el miedo del hombre...

ha inventado todos los cuentos.
Yo no sé muchas cosas, es verdad,
pero me han dormido con todos los cuentos...
y sé todos los cuentos.

León Felipe

Elegía interrumpida
02 de novim bre de 2014

Hoy recuerdo a los muertos de mi casa.
Al primer muerto nunca lo olvidamos,
aunque muera de rayo, tan aprisa
que no alcance la cama ni los óleos.
Oigo el bastón que duda en un peldaño,
el cuerpo que se afianza en un suspiro,
la puerta que se abre, el muerto que entra.
De una puerta a morir hay poco espacio
y apenas queda tiempo de sentarse,
alzar la cara, ver la hora
y enterarse: las ocho y cuarto.


Hoy recuerdo a los muertos de mi casa.
La que murió noche tras noche
y era una larga despedida,
un tren que nunca parte, su agonía.


Codicia de la boca
al hilo de un suspiro suspendida,
ojos que no se cierran y hacen señas
y vagan de la lámpara a mis ojos,
fija mirada que se abraza a otra,
ajena, que se asfixia en el abrazo
y al fin se escapa y ve desde la orilla
cómo se hunde y pierde cuerpo el alma
y no encuentra unos ojos a que asirse...

¿Y me invitó a morir esa mirada?
Quizá morimos sólo porque nadie
quiere morirse con nosotros, nadie
quiere mirarnos a los ojos.
Hoy recuerdo a los muertos de mi casa.
Al que se fue por unas horas
y nadie sabe en qué silencio entró.

De sobremesa, cada noche,
la pausa sin color que da al vacío
o la frase sin fin que cuelga a medias
del hilo de la araña del silencio
abren un corredor para el que vuelve:
suenan sus pasos, sube, se detiene...
Y alguien entre nosotros se levanta
y cierra bien la puerta.

Pero él, allá del otro lado, insiste.
Acecha en cada hueco, en los repliegues,
vaga entre los bostezos, las afueras.
Aunque cerremos puertas, él insiste.
Hoy recuerdo a los muertos de mi casa.

Rostros perdidos en mi frente, rostros
sin ojos, ojos fijos, vaciados,
¿busco en ellos acaso mi secreto,
el dios de sangre que mi sangre mueve,
el dios de yelo, el dios que me devora?
Su silencio es espejo de mi vida,
en mi vida su muerte se prolonga:
soy el error final de sus errores.
Hoy recuerdo a los muertos de mi casa.

El pensamiento disipado, el acto
disipado, los nombres esparcidos
(lagunas, zonas nulas, hoyos
que escarba terca la memoria),
la dispersión de los encuentros,
el yo, su guiño abstracto, compartido
siempre por otro (el mismo) yo, las iras,
el deseo y sus máscaras, la víbora
enterrada, las lentas erosiones,
la espera, el miedo, el acto
y su reverso: en mí se obstinan,
piden comer el pan, la fruta, el cuerpo,
beber el agua que les fue negada.

Pero no hay agua ya, todo está seco,
no sabe el pan, la fruta amarga,
amor domesticado, masticado,
en jaulas de barrotes invisibles
mono onanista y perra amaestrada,
lo que devoras te devora,
tu víctima también es tu verdugo.

Montón de días muertos, arrugados
periódicos, y noches descorchadas
y amaneceres, corbata, nudo corredizo:
-saluda al sol, araña, no seas rencorosa...-
Es un desierto circular el mundo,
el cielo está cerrado y el infierno vacío

 Octavio Paz

Cae el sol
29 de octubre de 2014

Perdóname. No volverá a ocurrir.
Ahora quisiera
meditar, recogerme, olvidar: ser
hoja de olvido y soledad.
Hubiera sido necesario el viento
que esparce las escamas del otoño
con rumor y color.
Hubiera sido necesario el viento.

Hablo con humildad,
con la desilusión, la gratitud
de quien vivió de la limosna de la vida.
Con la tristeza de quien busca
una pobre verdad en que apoyarse y descansar.
La limosna fue hermosa -seres, sueños, sucesos, amor-,
don gratuito, porque nada merecí.

¡Y la verdad! ¡Y la verdad!
Buscada a golpes, en los seres,
hiriéndolos e hiriéndome;
hurgada en las palabras;
cavada en lo profundo de los hechos
-mínimos, gigantescos, qué más da:
después de todo, nadie sabe
qué es lo pequeño y qué lo enorme;
grande puede llamarse a una cereza
( "hoy se caen solas las cerezas",
me dijeron un día, y yo sé por qué fue ),
pequeño puede ser un monte,
el universo y el amor.

Se me había olvidado algo
que había sucedido.
Algo de lo que yo me arrepentía
o, tal vez, me jactaba.
Algo que debió ser de otra manera.
Algo que era importante
porque pertenecía a mi vida: era mi vida.
(Perdóname si considero importante mi vida:
es todo lo que tengo, lo que tuve;
hace ya mucho tiempo, yo la habría vivido
a oscuras, sin lengua, sin oídos, sin manos,
colgado en el vacío,
sin esperanza.)

Pero se me ha borrado
la historia (la nostalgia)
y no tengo proyectos
para mañana, ni siquiera creo
que exista ese mañana (la esperanza).
Ando por el presente
y no vivo el presente
(la plenitud en el dolor y la alegría).
Parezco un desterrado
que ha olvidado hasta el nombre de su patria,
su situación precisa, los caminos
que conducen a ella.
Perdóname que necesite
averiguar su sitio exacto.

Y cuando sepa dónde la perdí,
quiero ofrecerte mi destierro, lo que vale
tanto como la vida para mí, que es su sentido.
Y entonces, triste, pero firme,
perdóname, te ofreceré una vida
ya sin demonio ni alucinaciones.
 
José Hierro


Adagio en mi país
20 de octubre de 2014




Margarita Santizo Martínez, integrante del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, llevaba más de tres años buscando a su hijo desaparecido, Esteban Morales, quien fue policía federal. Ella murió antes de localizarlo y nunca tuvo respuesta de las autoridades por su desaparición. Su último deseo fue que, como protesta, la velaran afuera del edificio de la Secretaria de Gobernación, en la calle de Bucareli.

Adagio en mi país

En mi país, qué tristeza,
la pobreza y el rencor.
Dice mi padre que ya llegará
desde el fondo del tiempo otro tiempo
y me dice que el sol brillará
sobre un pueblo que él sueña
labrando su verde solar.
En mi país, qué tristeza,
la pobreza y el rencor.

Tú no pediste la guerra,
madre tierra, yo lo sé.
Dice mi padre que un solo traidor
puede con mil valientes;
él siente que el pueblo en su inmenso dolor
hoy se niega a beber en la fuente
clara del honor.
Tú no pediste la guerra,
madre tierra, yo lo sé.

En mi país somos duros,
el futuro lo dirá.
Canta mi pueblo una canción de paz.
Detrás de cada puerta
está alerta mi pueblo,
y ya nadie podrá
silenciar su canción
y mañana también cantará.
En mi país somos duros,
el futuro lo dirá.

En mi país, qué tibieza
cuando empieza a amanecer.
Dice mi pueblo que puede leer
en su mano de obrero el destino
y que no hay adivino ni rey
que le pueda marcar el camino
que va a recorrer.
En mi país, qué tibieza
cuando empieza a amanecer.

Coro
En mi país somos miles y miles
de lágrimas y de fusiles,
un puño y un canto vibrante,
una llama encendida, un gigante
que grita: ¡Adelante... adelante...!

Solo
En mi país brillará,
yo lo sé,
el sol del pueblo arderá
nuevamente, alumbrando mi tierra.

Alfredo Zitarrosa..


Lista de los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos..
Octubre 08 , 2014

Vamos juntos

Con tu puedo y con mi quiero
vamos juntos compañero

compañero te desvela
la misma suerte que a mí
prometiste y prometí
encender esta candela

con tu puedo y con mi quiero
vamos juntos compañero

la muerte mata y escucha
la vida viene después
la unidad que sirve es
la que nos une en la lucha

con tu puedo y con mi quiero
vamos juntos compañero

la historia tañe sonora
su lección como campana
para gozar el mañana
hay que pelear el ahora

con tu puedo y con mi quiero
vamos juntos compañero

ya no somos inocentes
ni en la mala ni en la buena
cada cual en su faena
porque en esto no hay suplentes

con tu puedo y con mi quiero
vamos juntos compañero

algunos cantan victoria
porque el pueblo paga vidas
pero esas muertes queridas
van escribiendo la historia

con tu puedo y con mi quiero
vamos juntos compañero.

Mario Benedetti
Desaparecidos
Octubre 06 , 2014

Están en algún sitio / concertados
desconcertados / sordos
buscándose / buscándonos
bloqueados por los signos y las dudas
contemplando las verjas de las plazas
los timbres de las puertas / las viejas azoteas
ordenando sus sueños sus olvidos
quizá convalecientes de su muerte privada

nadie les ha explicado con certeza
si ya se fueron o si no
si son pancartas o temblores
sobrevivientes o responsos

ven pasar árboles y pájaros
e ignoran a qué sombra pertenecen

cuando empezaron a desaparecer
hace tres cinco siete ceremonias
a desaparecer como sin sangre
como sin rostro y sin motivo
vieron por la ventana de su ausencia
lo que quedaba atrás / ese andamiaje
de abrazos cielo y humo

cuando empezaron a desaparecer
como el oasis en los espejismos
a desaparecer sin últimas palabras
tenían en sus manos los trocitos
de cosas que querían

están en algún sitio / nube o tumba
están en algún sitio / estoy seguro
allá en el sur del alma
es posible que hayan extraviado la brújula
y hoy vaguen preguntando preguntando
dónde carajo queda el buen amor
porque vienen del odio

Mario Benedetti


MEMORIAL DE TLATELOLCO
Octubre 02 , 2014

La oscuridad engendra la violencia
y la violencia pide oscuridad
para cuajar el crimen.
Por eso el dos de octubre aguardó hasta la noche
Para que nadie viera la mano que empuñaba
El arma, sino sólo su efecto de relámpago.

¿Y a esa luz, breve y lívida, quién? ¿Quién es el que mata?
¿Quiénes los que agonizan, los que mueren?
¿Los que huyen sin zapatos?
¿Los que van a caer al pozo de una cárcel?
¿Los que se pudren en el hospital?
¿Los que se quedan mudos, para siempre, de espanto?

¿Quién? ¿Quiénes? Nadie. Al día siguiente, nadie.
La plaza amaneció barrida; los periódicos
dieron como noticia principal
el estado del tiempo.
Y en la televisión, en el radio, en el cine
no hubo ningún cambio de programa,
ningún anuncio intercalado ni un
minuto de silencio en el banquete.
(Pues prosiguió el banquete.)

No busques lo que no hay: huellas, cadáveres
que todo se le ha dado como ofrenda a una diosa,
a la Devoradora de Excrementos.

No hurgues en los archivos pues nada consta en actas.
Mas he aquí que toco una llaga: es mi memoria.
Duele, luego es verdad. Sangre con sangre
y si la llamo mía traiciono a todos.

Recuerdo, recordamos.
Ésta es nuestra manera de ayudar a que amanezca
sobre tantas conciencias mancilladas,
sobre un texto iracundo sobre una reja abierta,
sobre el rostro amparado tras la máscara.
Recuerdo, recordamos
hasta que la justicia se siente entre nosotros.

Rosario Castellanos

EL CAMBIO
September 28, 2014

Auroras boreales desde Fairbanks, Alaska.

Lo terreno, por ti,
se hizo gustoso
celeste.
Luego,
lo celeste, por mí,
contento se hizo
humano.
Juan Ramón Jiménez

Julio Cortázar cumple 100 años

Julio Florencio Cortázar (Ixelles, Región de Bruselas, 26 de agosto de 1914 - París, 12 de febrero de 1984) fue un escritor, traductor e intelectual de nacionalidad argentina

La patria

Esta tierra sobre los ojos,
este paño pegajoso negro de estrellas impasibles,
esta noche continua, esta distancia.
Te quiero, país tirado más abajo del mar, pez panza arriba,
pobre sombra  de país, lleno de vientos,
de monumentos y espamentos,
de orgullo sin objeto, sujeto para asaltos,
escupido curdela. inofensivo puteando y sacudiendo banderitas,
repartiendo escarapelas en la lluvia, salpicando
de babas y estupor canchas de fútbol y ringsides.
Pobres negros.
Te estás quemando a fuego lento, y dónde el fuego,
dónde el que come los asados y te tira los huesos.
Malandras, cajetillas, señores y cafishos,
diputados, tilingas de. apellido compuesto,
gordas tejiendo en los zaguanes, maestras normales, curas, escribanos,
centrofordwards, livianos, Fangio solo, tenientes
primeros, coroneles, generales, marinos, sanidad, carnavales, obispos
bagualas, chamamés, malambos, mambos, tangos,
secretarías, subsecretarías, jefes, contrajefes, truco,
contraflor al resto.Y qué carajo,
si la casita era su sueño, si lo mataron en pelea,
si usted lo ve, lo prueba y se lo lleva. -
 
 
Liquidación forzosa, se remata hasta lo último.
 Te quiero,. país tirado a la vereda, caja de fósforos vacía,
te quiero, tacho de basura. que se llevan sobre una. cureña
envuelto. en la bandera que nos legó Belgrano,
mientras las viejas lloran en el velorio, y anda el mate
con su verde consuelo, lotería del pobre,
y en cada.piso hay alguien que nació haciendo discursos
para algún otro que nació para escucharlos y pelarse las manos.
Pobres negros que juntan las ganas de ser blancos,
pobres blancos que viven un carnaval de negros,
qué quiniela, hermanito, en Boedo, en la Boca,
en Palermo y Barracas, en los puentes, afuera,
en los ranchos que paran la mugre de la pampa,
en las casas blanqueadas del silencio del norte,
en las chapas de zinc donde el frío se frota,
en la Plaza de Mayo donde ronda la muerte trajeada de Mentira.
Te quiero, país desnudo que sueña con un smoking,
vicecampeón del mundo en cualquier cosa, en lo que salga,
tercera posición, enegía nuclear, justicialismo, vacas,
tango, coraje, puños, viveza y elegancia.
 
Tan triste en lo más hondo de1 grito, tan golpeado
en lo mejor de la garufa, tan.garifo a la hora de la autopsia.
Pero te quiero, país de barro, y otros te quieren, y algo
saldrá de este sentir. Hoy es distancia, fuga,
no te metás, qué vachaché, dale que va, paciencia.
La tierra entre los dedos, la basura en los ojos,
ser argentino es estar triste, ser argentino es estar lejos.
 
Y no decir: mañana,
porque ya basta con ser flojo ahora.
Tapándome la cara
(el poncho te lo dejo, folklorista infeliz)
me acuerdo de una estrella en pleno campo,
me acuerdo de un amanecer de puna,
de Tilcara de tarde, de Paraná fragante,
de Tupungato arisca, de un vuelo de flamencos
quemando un horizonte de bañados.
Te quiero, país, pañuelo sucio, con tus calles
cubiertas de carteles peronistas, te quiero
sin esperanza y sin perdón, sin vuelta y sin derecho,
nada más que de lejos y amargado y de noche.

Julio Corázar 

El único defecto de la mujer

Para cuando Dios hizo a la mujer, ya estaba en su sexto día de trabajo
de horas extras. Un ángel apareció y le dijo: "¿Por qué pones tanto tiempo en esta?"

Y El Señor contestó: "¿Has visto mi Hoja de Especificaciones para ella?"
Debe ser completamente lavable, pero no ser de plástico, tener más de 200
piezas movibles, todas reemplazables, y ser capaz de funcionar con
una dieta de cualquier cosa y sobras, tener un regazo que pueda acomodar cuatro niños al mismo tiempo, tener un beso que pueda curar desde una rodilla raspada hasta un corazón roto; y lo hará todo con solamente dos manos." El ángel se maravilló de los requisitos. "Solamente dos manos... Imposible! ...Y ¿este es solamente el modelo estándar? Es demasiado trabajo para un día... Espera hasta mañana para terminarla."

"No lo haré, -protestó el Señor- estoy tan cerca de terminar esta creación que ya es la favorita de mi propio corazón. Ella ya se cura sola cuando está enferma y puede trabajar días de 18 horas."

El ángel se acercó más y tocó a la mujer. "Pero la has hecho tan suave, Señor"

"Es suave, -dijo Dios- pero la he hecho también fuerte. No tienes idea de lo que puede aguantar o lograr"

"Será capaz de pensar?" -preguntó el ángel.

Dios contestó- "No solamente será capaz de pensar sino que puede razonar y negociar"

El ángel entonces notó algo y alargando la mano tocó la mejilla de la mujer...."Señor, parece que este modelo tiene una fuga... te dije que estabas tratando de poner demasiadas cosas en ella"

"Eso no es ninguna fuga... es una lágrima" -lo corrigió El Señor.

"¿Para qué es la lágrima?" -preguntó el ángel.

Y Dios dijo: "Las lágrimas son su manera de expresar su dicha, su pena, su sengaño, su amor, su soledad, su sufrimiento, y su orgullo."

Esto impresionó mucho al ángel "Eres un genio, Señor, pensaste en todo. La mujer es verdaderamente maravillosa"

"¡Lo es! La mujer tiene fuerzas que maravillan a los hombres, aguantan dificultades, llevan grandes cargas, pero tienen felicidad, amor y dicha en grandes cantidades. Sonríen cuando quieren gritar. Cantan cuando quieren llorar. Lloran cuando están felices y ríen cuando están nerviosas. Luchan por lo que creen. Se enfrentan a la injusticia. No aceptan un "no" por respuesta , cuando ellas creen que hay una solución mejor. Se privan de lo que sea para que su familia pueda tener lo suficiente. Van al médico con una amiga que tiene miedo de ir. Aman incondicionalmente. Lloran cuando sus hijos triunfan y se alegran cuando sus amistades consiguen premios. Son felices cuando escuchan sobre un nacimiento o una boda. Su corazón se rompe cuando muere una amiga. Sufren con la pérdida de un ser querido, sin embargo son fuertes cuando piensan que ya no hay fuerza para mas. Saben que un beso y un abrazo pueden ayudar a curar un corazón roto. La mujer viene en todos tamaños, en todos colores y en todas figuras. Van a manejar, volar, caminar, correr o mandarte un mensaje electrónico para mostrarte cuanto le importas. El corazón de las mujeres es lo que mantiene moviéndose al mundo. Traen dicha y esperanza. Tienen compasión e ideales. Dan apoyo moral a su familia y amistades. Las mujeres tienen cosas vitales qué decir y todo para dar."

"Sin embargo, hay un defecto en la mujer: Es que se le olvida cuánto vale."


Amor mío, mi amor...

Amor mío, mi amor, amor hallado
de pronto en la ostra de la muerte.
Quiero comer contigo, estar, amar contigo,
quiero tocarte, verte.

Me lo digo, lo dicen en mi cuerpo
los hilos de mi sangre acostumbrada,
lo dice este dolor y mis zapatos
y mi boca y mi almohada.

Te quiero, amor, amor absurdamente,
tontamente, perdido, iluminado,
soñando rosas e inventando estrellas
y diciéndote adiós yendo a tu lado.

Te quiero desde el poste de la esquina,
desde la alfombra de ese cuarto a solas,
en las sábanas tibias de tu cuerpo
donde se duerme un agua de amapolas.

Cabellera del aire desvelado,
río de noche, platanar oscuro,
colmena ciega, amor desenterrado,

voy a seguir tus pasos hacia arriba,
de tus pies a tu muslo y tu costado.

Jaime Sabines

PADRE NUESTRO

Padre nuestro que estás en el cielo
Lleno de toda clase de problemas
Con el ceño fruncido
Como si fueras un hombre vulgar y corriente
No pienses más en nosotros.


Comprendemos que sufres
Porque no puedes arreglar las cosas.
Sabemos que el Demonio no te deja tranquilo
Desconstruyendo lo que tú construyes.
El se ríe de ti
Pero nosotros lloramos contigo:


No te preocupes de sus risas diabólicas.
Padre nuestro que estás donde estás
Rodeado de ángeles desleales
Sinceramente: no sufras más por nosotros
Tienes que darte cuenta
De que los dioses no son infalibles
Y que nosotros perdonamos todo.


Nicanor Parra