"Viví en el monstruo y le conozco
las entrañas: y mi honda es la de David"
José Martí
Por Octaviano Lozano Tinoco
analista político
Inmarcesible
México y Estados Unidos, como hermanos siameses, están condenados por la geografía a una integración inevitable. Sin embargo, la relación ha sido desigual. El vecino del norte, históricamente, ha dominado a México: primero con invasiones y el despojo de más de la mitad de su territorio, y luego tratándolo como su "patio trasero" de mano de obra barata, recursos naturales y un mercado para el crimen organizado que beneficia a sus bancos y somete a gobiernos mexicanos.
Con el Tratado de Libre Comercio, firmado por Carlos Salinas de Gortari, George H. Bush y Brian Mulroney, la integración económica se profundizó. En 2024, el comercio bilateral alcanzó 559.8 mil millones de dólares entre enero y agosto, consolidando a México como uno de los principales socios comerciales de Estados Unidos, con un flujo anual cercano a los 840 mil millones.
No obstante, la llegada de la segunda administración de Donald Trump ha tensado la relación. Su enfoque agresivo incluye amenazas de sanciones arancelarias, políticas migratorias estrictas y una cruzada contra el narcotráfico mexicano.
Ha calificado a los cárteles como una amenaza directa a Estados Unido, proponiendo desde ataques aéreos hasta asesinatos selectivos. "Los cárteles libran una guerra contra nosotros, y es hora de que les declaremos la guerra", afirmó ante el Congreso en marzo de 2025.
Mark Esper, exsecretario de Defensa, reveló que Trump ya había contemplado lanzar misiles contra laboratorios de drogas en México durante su primer mandato. Ahora, con el respaldo de su vicepresidente J.D. Vance, el mandatario advierte que México podría convertirse en un "narco-Estado" si no controla a los cárteles. Vance señaló: "Esperamos que México actúe, y si no, veremos qué hacer".
El 20 de enero, Trump firmó una orden ejecutiva que designa a cárteles como el Jalisco Nueva Generación, Sinaloa, Golfo, Nueva Familia Michoacana, del Noroeste y Cárteles Unidos como "organizaciones terroristas extranjeras". Esta medida, según Marco Rubio, secretario de Estado, podría justificar acciones militares. Al ser cuestionado por un periodista, Trump no descartó una intervención: "Es posible. Cosas más raras se han visto".
La idea de una invasión no es nueva. En The Next War (1998), Caspar Weinberger, exsecretario de Defensa, describe un escenario donde Estados Unidos invade México por la crisis del narcotráfico y la corrupción. Su "Plan operativo del Pentágono" detalla una operación con ataques aéreos y avances terrestres desde Brownsville, Fort Hood y Tucson, diseñada para quebrar al ejército mexicano y controlar el país.
Recientemente, medios como The New York Times y CNN reportaron un aumento en vuelos de espionaje con drones sobre México, ordenados por Trump para monitorear a los cárteles. Su afirmación de que "México está gobernado en buena medida por los cárteles" ha avivado la controversia.
La retórica beligerante de Trump ignora una realidad: desestabilizar a México también afectaría a Estados Unidos. La interdependencia es innegable, y el futuro de ambos países depende de un entendimiento mutuo, no de confrontaciones.
Israel y su ambigüedad nuclear: secreto a voces en Oriente Medio
25 Junio 2025
“Cadáveres anónimos.
Ningún olvido los reúne,
Ningún recuerdo los separa...
Olvidados en la hierba invernal
Sobre la vía pública,
Entre dos largos relatos de bravura
Y sufrimiento.
"¡Yo soy la víctima!". "¡No, yo soy
la única víctima!". Ellos no replicaron:
"Una víctima no mata a otra.
Y en esta historia hay un asesino
Y una víctima". Eran niños.
Mahmoud Darwish
Por Octaviano Lozano Tinoco
analista político
Inmarcesible
Tras la reciente guerra de 12 días entre Irán e Israel, con el bombardeo de Estados Unidos a las bases nucleares iraníes de Natanz, Isfahán y Fordo —esta última clave en el programa iraní—, la situación permanece tensa. Irán insiste en continuar su enriquecimiento de uranio con fines pacíficos, mientras Estados Unidos y su aliado Israel afirman que su infraestructura nuclear fue destruida.
Israel sostiene su determinación de neutralizar el programa iraní, al que considera una amenaza existencial por su potencial armamentístico. Sin embargo, Irán niega tener objetivos militares, mientras Israel es señalado como la única potencia nuclear de Oriente Medio, un hecho que nunca ha confirmado ni desmentido oficialmente.
Esta política de ambigüedad nuclear permite a Israel reforzar su disuasión frente a enemigos como Irán, sin desencadenar una carrera armamentista regional ni atraer ataques preventivos, según expertos. Al no adherirse al Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), por Israel elude inspecciones internacionales en instalaciones como el Centro de Investigación Nuclear de Dimona, en el desierto del Néguev.
Críticos, especialmente en Irán, acusan a Occidente de hipocresía por sancionar el programa iraní —que Teherán asegura es pacífico— mientras ignoran el arsenal atribuido a Israel. El director del OIEA, Rafael Grossi, señaló recientemente que información obtenida por Irán "parece referirse a un sitio nuclear israelí", avivando el debate.
Israel comenzó su programa nuclear en 1958, bajo el liderazgo de David Ben-Gurión, quien veía en las armas nucleares una garantía de supervivencia frente a vecinos hostiles. Dimona, presentado inicialmente como una fábrica textil, empezó a producir plutonio en los 60, según el Bulletin of the Atomic Scientists. Expertos estiman que Israel alcanzó capacidad nuclear a principios de los 70.
En 1986, Mordechai Vanunu, extécnico de Dimona, reveló al The Sunday Times detalles del reactor, con fotos que evidenciaban la producción de armas nucleares. Condenado por traición, Vanunu cumplió 18 años de prisión y aún enfrenta restricciones.
Analistas calculan que Israel posee entre 80 y 200 ojivas nucleares, probablemente en el rango inferior. Según la Iniciativa de Amenaza Nuclear, acumuló hasta 1,110 kg de plutonio, suficiente para fabricar unas 277 armas. Además, cuenta con submarinos capaces de lanzar misiles nucleares y misiles balísticos con alcance de hasta 6,500 km.
El gobierno israelí evita comentar sobre su arsenal. En 2008, el expresidente Jimmy Carter afirmó que Israel tenía “150 o más” armas nucleares, declaración que el exjefe de inteligencia militar israelí, Aharon Zeevi Farkash, calificó de “irresponsable”. El Instituto de Investigación para la Paz de Estocolmo estima que Israel posee unas 90 ojivas.
La opacidad de Israel, respaldada tácitamente por Estados Unidos, busca mantener su superioridad militar y evitar la inestabilidad regional. Israel ha impedido activamente que sus adversarios obtengan armas nucleares, destruyendo un reactor en Irak en 1981 y otro en Siria en 2007. Hoy, su enfoque está en Irán, cuya censura por el OIEA precedió los recientes ataques israelíes.
La ambigüedad nuclear de Israel, aunque efectiva para su seguridad, resalta las tensiones en el control de la proliferación nuclear en una región al borde del conflicto.
El pasado 24 de junio, la representante estadounidense Marjorie Taylor Greene sugirió en X que el asesinato de John F. Kennedy podría estar vinculado a su oposición al programa nuclear israelí, cuestionando si ella y Donald Trump enfrentan peligros similares por criticar a Israel.
Greene aludió a la presión de Kennedy sobre el entonces primer ministro israelí, David Ben-Gurión, para detener el desarrollo nuclear en Dimona, advirtiendo que el apoyo de Estados Unidos a Israel podría verse comprometido. Aunque no hay evidencia concreta que relacione la muerte de Kennedy con Israel, sus comentarios han reavivado especulaciones.
Greene también criticó los recientes ataques de Estados Unidos a Irán, denunciando las guerras en el extranjero por “intereses extranjeros” y el costo humano para las tropas estadounidenses.
Estados Unidos ataca, ¿da inicio a la Tercera Guerra Mundial?
23 Junio 2025
No quiero paz, no hay paz,
quiero mi soledad.
Quiero mi corazón desnudo
para tirarlo a la calle,
quiero quedarme sordomudo.
Jaime Sabines
Por Octaviano Lozano Tinoco
analista político
Inmarcesible
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, conmocionó al mundo este sábado 21 de junio de 2025 al atacar tres instalaciones nucleares iraníes: Fordow, Natanz e Isfahán. En un mensaje en Truth Social, Trump anunció: “Hemos completado nuestro ataque muy exitoso contra los tres sitios nucleares en Irán. Todos los aviones están fuera del espacio aéreo iraní. Felicitaciones a nuestros grandes guerreros estadounidenses. ¡Ahora es el momento de la paz!”. Un funcionario estadounidense, bajo anonimato, confirmó a Reuters que bombarderos B-1 participaron en la operación, diseñada para neutralizar el programa nuclear iraní.
En un discurso desde la Casa Blanca, Trump reiteró la destrucción de las centrales y advirtió: “Irán debe buscar la paz o enfrentará ataques mayores”. Agradeció al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, por su colaboración y elogió a los pilotos: “ realizaron una operación como no se veía en décadas”. La acción, según Trump, responde a años de amenazas iraníes contra Estados Unidos e Israel, citando la muerte del general Qassem Soleimani como antecedente, en un operativo en el aeropuerto de Bagdad, Irak.
Israel, aliado clave en la ofensiva, elevó su alerta de seguridad y restringió actividades no esenciales. Netanyahu felicitó a Trump por su “audaz decisión” en un video en X, afirmando: “La paz se logra con la fuerza”. El espacio aéreo israelí fue cerrado temporalmente por “acontecimientos recientes”.
Irán, por su parte, aseguró que no detectó contaminación radiactiva en los sitios atacados. Medios estatales citaron al Centro del Sistema Nacional de Seguridad Nuclear, que afirmó: “No hay peligro para los residentes”. Sin embargo, el régimen iraní anunció que continuará su programa nuclear pese a los daños, elevando la tensión con Washington. El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) señaló que ataques previos en la región no liberaron material radiactivo.
La comunidad internacional reaccionó con alarma. El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó: “Se está profundamente preocupado por el uso de la fuerza por parte de Estados Unidos, una escalada peligrosa en una región al borde del abismo”. China y Rusia aún no han fijado posición, pero el presidente ruso, Vladimir Putin, había advertido previamente sobre el riesgo de una tercera guerra mundial. En el Foro Económico de San Petersburgo, Putin descartó asistencia militar a Irán, aunque defendió su derecho a la energía nuclear pacífica.
El ataque debilita gravemente la capacidad nuclear de Irán, con sus instalaciones clave dañadas y sus defensas aéreas mermadas tras bombardeos israelíes previos. En redes sociales, el término “#Tercera Guerra Mundial” se volvió tendencia, reflejando el temor global ante un conflicto incierto. Miles de usuarios expresaron conmoción y compartieron memes sobre las implicaciones.
La escalada eleva las tensiones en Oriente Medio, con Irán en una posición crítica y Estados Unidos involucrado directamente en el conflicto junto a Israel. La comunidad internacional teme las consecuencias, mientras Trump insiste en que su acción busca garantizar la paz.
Inmarcesible
19 Junio 2025
Hacer del mundo un lugar posible para los más necesitados
Llevo aquí en este mundo largo tiempo. Y nuestros amos dicen que ya es hora de callarme y hundirme en la basura. José Emilio Pacheco
Por Octaviano Lozano Tinoco
analista político
En estos tiempos de crisis en todos los frentes —económica, ecológica, política y cultural—, la paz mundial, que nunca ha sido nuestro pan de cada día, se encuentra una vez más en la cuerda floja, al borde de un abismo que, de colapsar, podría desencadenar formalmente la tercera guerra mundial en la era reciente de la humanidad.
El ataque de Israel contra Irán, basado en el argumento de que este último está a punto de desarrollar una bomba atómica —la misma narrativa que desde la década de los ochenta justificó la destrucción de Irak y el régimen de Saddam Hussein, en su momento aliado de Estados Unidos—, pone en riesgo la estabilidad global.
Pero, ¿cómo sentar las bases para la paz en los países y, por ende, en el mundo entero? Considero que el sistema de explotación en el que vivimos, que genera miseria en lugar de progreso para la mayoría, es el cerillo que incendia las estepas secas del planeta. La guerra, lejos de ser solo un conflicto, es una forma de economía que los grandes capitales utilizan para acrecentar su poder, relanzar la industria bélica y generar riqueza, a costa de la muerte y la destrucción.
Si los gobiernos implementaran un paraguas social que garantice educación, seguridad, salud, vivienda y trabajo, se podrían construir sociedades más justas y pacíficas. Esto reduciría la migración forzada y la violencia en las calles, pues cuando todo se deja en manos del mercado y lo privado, el caos se apodera de la sociedad.
Persiste en el mundo una profunda desigualdad entre los poderosos y los más desfavorecidos. Mientras una élite concentra riqueza y poder, millones de personas viven en la pobreza, enfrentando dificultades para acceder a necesidades básicas como alimentos, vivienda y atención médica. Esta disparidad genera graves consecuencias sociales, económicas y políticas.
Según la ONU, la población mundial supera los 8,000 millones de personas y se proyecta que alcanzará los 10,400 millones en 2080, aunque a un ritmo más lento. En contraste, la lista Forbes 2024 registra aproximadamente 2,781 multimillonarios, cuyas fortunas suman 16.1 billones de dólares, superando el PIB de varios países.
En 2025, se estima que entre 648 y 700 millones de personas viven en pobreza extrema, equivalente al 8.5% de la población mundial. Aunque esta cifra refleja una leve disminución respecto a años anteriores, está lejos de cumplir el objetivo de erradicar la pobreza extrema para 2030. Los países más afectados incluyen Afganistán, Sudán del Sur, Sierra Leona, Malawi, Madagascar, República Centroafricana, Burundi y Mozambique, donde desafíos económicos, políticos y sociales agravan la vulnerabilidad de sus poblaciones. En términos de desigualdad económica, Zambia, Honduras, Haití, Surinam, Botsuana, China, Sudáfrica y Namibia presentan los mayores índices.
Datos clave sobre la pobreza: (Con información de la ONU)
1,100 millones de personas viven en pobreza multidimensional, careciendo de acceso a servicios básicos como salud, vivienda o combustible para cocinar.
África concentra el 33% de la población pobre mundial, con un 27.9% de niños en situación de pobreza.
Entre las causas de la pobreza destacan el colonialismo, el comercio desigual y la exclusión social.
Concentración de poder y riqueza:
La desigualdad económica ha crecido en los últimos años, con una élite acumulando riqueza mientras la mayoría lucha por mantener su nivel de vida.
En Estados Unidos, tres personas poseen la misma riqueza que la mitad más pobre de la población, un contraste notable frente a hace 25 años, cuando se necesitaban 30 multimillonarios para igualar esa cifra.
La desigualdad afecta negativamente la salud, la esperanza de vida y las oportunidades.
Genera inestabilidad social y política, incrementando la polarización y el apoyo a movimientos extremistas.
Reduce la esperanza en el futuro, especialmente entre los jóvenes.
15 Junio 2025
¡No en nuestro nombre¡
(Frase que se debe decir hasta el fin de los tiempo)
Cadáveres anónimos.
Ningún olvido los reúne,
Ningún recuerdo los separa...
Olvidados en la hierba invernal
Sobre la vía pública,
Entre dos largos relatos de bravura
Y sufrimiento.
"¡Yo soy la víctima!". "¡No, yo soy
la única víctima!". Ellos no replicaron:
"Una víctima no mata a otra.
Y en esta historia hay un asesino
Y una víctima". Eran niños,
Mahmud Darwish
Por Octaviano Lozano Tinoco
La humanidad enfrenta una vez más la amenaza de conflictos bélicos impulsados por ambiciones geopolíticas y económicas.
Potencias con ejércitos y misiles buscan imponer su dominio, dejando a su paso destrucción y pérdida de vidas.
La guerra, una constante en la historia, ha marcado a generaciones con enfrentamientos que trascienden fronteras y épocas.
En las últimas décadas, diversos conflictos han dejado cicatrices imborrables.
La Guerra de Vietnam (1955-1975) enfrentó a Estados Unidos con Vietnam del Norte en un choque ideológico que culminó con la retirada estadounidense y millones de víctimas.
La Guerra de Corea (1950-1953) dividió la península, dejando un alto costo humano y una frontera tensa, sin un tratado de paz definitivo.
La Guerra Irán-Irak (1980-1988) desangró a ambas naciones durante ocho años, con cientos de miles de muertos.
La Guerra del Golfo (1991) Una coalición militar de Occidente, liderada por Estados Unidos, expulsó a Irak de Kuwait.
La Guera de Irak (2003-2011) derrocó a Saddam Hussein, generando inestabilidad regional.
Las guerras de los Balcanes (1991-1999) fragmentaron Yugoslavia, marcadas por atrocidades en Bosnia.
La Guerra de Siria (2011-2023). Desató una crisis humanitaria, tras derrocar el regimen de Baschar el-Assad y expulsar del país al Estado Islámico.
La Guerra de Afganistán (2001-2021). Después de los ataques del 11 de septiembre, Estados Unidos invadió Afganistán para derrocar al régimen talibán, que había acogido a Al-Qaeda. Terminó el coflicto con el regreso de los talibanes al poder.
Hoy, tres conflictos destacan por su impacto global. En Ucrania, la invasión rusa del 24 de febrero de 2022 escaló un conflicto latente desde 2014 por Crimea y Donbás. Condenada como violación del derecho internacional, la agresión rusa amenaza la estabilidad europea.
En Gaza, el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023, que dejó 1,200 muertos y 251 rehenes, desató una respuesta israelí con más de 54,600 fallecidos, según fuentes gazatíes, en su mayoría civiles.
El conflicto Israel-Irán, iniciado el 13 de junio de 2025 con la operación israelí “León Creciente” contra objetivos nucleares y militares iraníes, causó la muerte del general Hossein Salamí y los científicos Mohammad Mehdi Tehranchi y Fereydoun Abbasi, además de víctimas civiles en Teherán, según medios iraníes. Israel justificó los ataques como medida preventiva contra el programa nuclear iraní y su apoyo a grupos como Hezbolá y los hutíes. El primer ministro Benjamin Netanyahu afirmó que las operaciones continuarán, mientras Estados Unidos, informado del ataque, urgió a Irán evitar represalias contra intereses estadounidenses.
En respuesta, el régimen ha lanzado sus misiles y drones contra territorio israelí.
La raíz de muchos conflictos armados radica en la disputa por recursos naturales. Estudios de la ONU indican que más del 40% de los conflictos internos en los últimos 60 años están ligados a recursos como petróleo, gas, agua o tierras fértiles. La “maldición de los recursos” genera inestabilidad, exacerbada por el cambio climático, el crecimiento demográfico y la demanda global. La competencia por estos recursos intensifica la violencia, perpetuando ciclos de conflicto.
Nadie sabe cuándo terminarán estas guerras ni a qué costo. Mientras generan riqueza para algunos, el precio lo pagan millones de vidas y el frágil equilibrio de la paz mundial.
¿Y la democracia y el respeto a los derechos humanos?
12 Junio 2025
“No olvides nunca
que los menos fascistas
de entre los fascistas
también son fascistas.”
Roque Dalton
Es hora de sancionar a Estados Unidos
Por Octaviano Lozano Tinoco
En su afán por cumplir su lema “Hagamos que Estados Unidos vuelva a ser grande” (MAGA, por sus siglas en inglés), el presidente Donald Trump ha desatado una serie de políticas que, según críticos, atentan contra la democracia, los derechos humanos y las relaciones internacionales.
Mientras otras naciones, como China, Rusia, Venezuela, Cuba o Nicaragua, habrían enfrentado sanciones por medidas similares, Estados Unidos parece actuar con impunidad.
El reciente conflicto en Los Ángeles, California, ilustra esta situación. Tras redadas masivas del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) el viernes, la comunidad salió a las calles para protestar. Trump describió a la ciudad como “invadida y ocupada por inmigrantes ilegales y criminales” y afirmó que las manifestaciones fortalecen su decisión de deportar.
En un mensaje en Truth Social, ordenó a la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem; al secretario de Defensa, Pete Hegseth; y a la fiscal general, Pam Bondi, “liberar a Los Ángeles de la invasión de inmigrantes y poner fin a los disturbios”.
En respuesta, Trump desplegó 4,000 efectivos de la Guardia Nacional y 700 marines en la ciudad, algunos frente al edificio federal que alberga una cárcel de ICE.
Esta acción, amparada en una controvertida disposición federal, pasó por alto al gobernador de California, Gavin Newsom, en un hecho sin precedentes en 60 años. Newsom calificó la decisión de “demente” y “dictatorial”, asegurando que los marines no deberían enfrentarse a sus compatriotas para cumplir “la fantasía de un presidente dictatorial”. La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, llamó a protestar pacíficamente. Trump amenazó con detener a ambos políticos demócratas
Las manifestaciones, que incluyeron familias con niños, derivaron en enfrentamientos con la Policía de Los Ángeles (LAPD), que declaró las protestas como “asamblea ilegal” para dispersarlas. Los manifestantes, portando banderas de diversos países, incluyendo la estadounidense, bloquearon la Autopista 101 y arrojaron objetos como confeti y botellas de agua. La Policía usó gases lacrimógenos para disolver la multitud.
Con cerca de un millón de indocumentados entre los diez millones de habitantes del condado de Los Ángeles, la comunidad mostró su diversidad y rechazo a las políticas migratorias de Trump. El presidente, por su parte, acusó a la “izquierda radical” de orquestar las protestas y anunció que prohibirá el uso de máscaras en manifestaciones.
Críticos argumentan que Estados Unidos, lejos de ser un modelo de democracia, se encamina hacia prácticas autoritarias. Mientras el mundo observa, surge la pregunta: ¿es momento de que la comunidad internacional sancione a Estados Unidos por vulnerar los derechos humanos y debilitar su democracia?
Estas ruinas que ves: El reality show de la Oficina Oval
09 Junio 2025
Titulares País de mi sangre que graba en sí mismo nuevas fronteras con forma de pistola, el gatillo un fluir de niños insomnes Robert Pesich
Por Octaviano Lozano Tinoco
Mientras China se consolida como la gran potencia del siglo XXI, Estados Unidos enfrenta una crisis económica y política sin precedentes, agravada por la presidencia de Donald Trump, quien ha roto todas las convenciones en un intento por frenar el declive de su nación. El último capítulo: su ruptura pública con el magnate Elon Musk.
Fracasó la estrategia de unir poder político y económico para rescatar a Estados Unidos.
En las últimas dos décadas, China transformó su economía agraria en una potencia manufacturera y tecnológica, destacando en computación cuántica, trenes de alta velocidad, tecnología 5G, energías renovables, comercio electrónico y vehículos eléctricos. Desde las reformas de Deng Xiaoping en los años 70, China ha sacado a más de 700 millones de personas de la pobreza extrema, un logro histórico reconocido mundialmente.
En contraste, Estados Unidos enfrenta un panorama sombrío. El déficit presupuestario alcanzó los 1.833 billones de dólares en 2024, el más alto fuera de la pandemia, con intereses de la deuda superando el billón de dólares por primera vez, según el Departamento del Tesoro.
El gasto en Seguridad Social, salud y defensa también se incrementó. A pesar de ser la nación más rica, Estados Unidos registra índices de pobreza alarmantes entre los países desarrollados. Más de 60 años después de que el presidente Lyndon B. Johnson declarara la “guerra contra la pobreza”, la tasa de pobreza apenas ha disminuido del 19% al 12%, dejando a unos 40 millones de estadounidenses en la miseria.
En este contexto, la relación entre Trump y Musk, que pasó de una alianza política a una ruptura pública, refleja la inestabilidad del país. El incidente que desató las alarmas fue el sospechoso ojo morado de Musk durante su despedida del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) en la Casa Blanca.
Trump le obsequió una llave dorada en el evento, donde Musk apareció con una marca visible en el rostro. El empresario atribuyó el ojo morado a un golpe accidental de su hijo de cinco años. “Estaba jugando con mi hijo pequeño y lo desafié. Le dije: ‘Adelante, dame un puñetazo en la cara’. Y lo hizo”, explicó Musk a los periodistas. Sin embargo, su comportamiento errático y aparente estado inconveniente generaron especulaciones.
Musk, quien apoyó la reelección de Trump con casi 300 millones de dólares, criticó duramente el proyecto de ley presupuestaria del presidente, calificándolo de “abominación”.
La tensión escaló cuando Trump, a través de Truth Social, acusó a Musk de “volverse loco” y amenazó con cancelar los subsidios y contratos gubernamentales de sus empresas. Musk respondió afirmando que sin su apoyo Trump habría perdido las elecciones y aludió a supuestos vínculos del presidente con Jeffrey Epstein, lo que la Casa Blanca calificó de “lamentable”.
Horas después, Musk eliminó de la red X su mensaje que relacionaba a Trump con Epstein, el traficante de menores que murió de manera misteriosa en prisión.
La disputa se trasladó a X, donde Musk anunció el desmantelamiento de la nave Dragon de SpaceX, utilizada por la NASA para misiones a la Estación Espacial Internacional. Sin embargo, tras un intercambio con usuarios, dio marcha atrás:
“Está bien, no desmantelaremos a Dragon”. La pelea provocó una caída del 14,26% en las acciones de Tesla, con una pérdida de 150.000 millones de dólares en valor de mercado. No obstante, un posible diálogo entre ambos, reportado por Politico, hizo repuntar las acciones un 5% en la preapertura del viernes 6 de junio.
Musk, otrora crítico de Trump, abrazó su agenda de desregulación y recortes fiscales tras frustraciones con las políticas de Obama. Su rol como asesor en el DOGE generó controversia, afectando las acciones y ventas de Tesla.
La eliminación del subsidio de 7.500 dólares para vehículos eléctricos, impulsada por Trump, podría costarle a Tesla 1.200 millones de dólares anuales, según JP Morgan. Además, los aranceles de Trump afectan a Tesla, que depende de componentes chinos para su Cybercab y camión semieléctrico.
La amenaza de Trump de cancelar contratos federales con SpaceX, que ha recibido 22.000 millones de dólares desde 2000, pondría en riesgo no solo las finanzas de Musk, sino también las ambiciones espaciales de Estados Unidos. La Crew Dragon es la única nave certificada para llevar astronautas a la ISS, y Starlink, otro proyecto de Musk, es clave para comunicaciones militares y de emergencia.
La reconciliación entre Trump y Musk parece inevitable, pero el daño está hecho. Esta disputa pública, junto con los desafíos económicos y sociales, evidencia el declive de un país atrapado en su propio reality show político.
¿La democracia y el voto, para qué?
06 Junio 2025
“No puedes hacer una revolución para tener la democracia. Debes tener la democracia para hacer una revolución”.
Gilbert Keith Chesterton
Por Octaviano Lozano Tinoco
México atraviesa una encrucijada histórica. La victoria de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en 2018 marcó un punto de inflexión con su propuesta de “revolución de las conciencias” y “humanismo mexicano”. Con el respaldo del pueblo, la democracia y el voto fueron la vela y el timón de este proceso.
En 2018, AMLO, liderando Morena en coalición, obtuvo 30,113,483 votos (53.19%), según el INE. En 2024, Claudia Sheinbaum, con la misma coalición, logró un récord histórico: 35,924,519 votos (59.76%), superando a AMLO por 5.8 millones de sufragios.
Sin embargo, el camino no ha sido fácil. El narcotráfico, medios de comunicación, grupos de oposición y la presión internacional han intentado descarrilar este proyecto. Durante la administración de Joe Biden, la relación con Estados Unidos fue menos tensa, pero con Donald Trump, las amenazas han escalado: aranceles, militarización de la frontera y la designación de cárteles mexicanos como grupos terroristas, lo que podría justificar operativos militares unilaterales en México. La llegada de Ronald D. Johnson, coronel retirado con experiencia en El Salvador, Afganistán e Irak, como embajador en México, intensifica estas tensiones.
Frente a estos desafíos, el gobierno de Morena ha respondido con más democracia. En agosto de 2021, una consulta ciudadana buscó enjuiciar a cinco expresidentes, pero solo participó entre el 7.07% y 7.74% de los convocados, lejos del 40% necesario para ser vinculante.
En abril de 2022, México hizo historia con un referéndum de revocación de mandato, propuesto por AMLO. Los ciudadanos decidieron si continuaba o no en el cargo. Con dos opciones —“que se le revoque el mandato” o “que siga en la Presidencia”—, AMLO obtuvo el respaldo para concluir su sexenio.
El 1 de junio de 2025, México celebró las primeras elecciones judiciales de su historia, un proceso inédito a nivel mundial. Pese a una campaña en contra de medios, oposición y prensa internacional, logró una participación del 13%. Aunque baja, superó las expectativas frente a los obstáculos, demostrando que el pueblo puede decidir su destino.
En México, la baja participación en procesos como las elecciones judiciales de 2025, con miles de candidatos desconocidos y papeletas complejas, refleja desafíos. Sin embargo, quienes votan deciden por los ausentes, reafirmando el poder del pueblo. Como dice el refrán, “el que calla, otorga”. La democracia, frágil pero esencial, exige participación para transformar la realidad.
La democracia y el voto
La democracia es el sistema donde el pueblo ejerce la soberanía, ya sea directamente o a través de representantes. Del griego dêmos (pueblo) y krateîn (poder), significa “el poder del pueblo”. A diferencia de dictaduras o autoritarismos, la democracia garantiza que las decisiones clave, como la elección de gobernantes, se sometan a votación libre, secreta y universal. Los representantes deben priorizar el bien común, respetando los derechos humanos y las libertades fundamentales, según la Declaración Universal de Derechos Humanos.
La democracia no se limita a elecciones. Incluye referendos, debates y movilizaciones ciudadanas, cuyos mecanismos varían según el país. Aunque a veces se confunde con el concepto de república —que implica separación de poderes y equidad ante la ley—, son nociones distintas. Puede haber democracias no republicanas y repúblicas no democráticas.
El voto es la piedra angular de la democracia. Permite a los ciudadanos influir en el rumbo de su país.
Cada voto cuenta para construir un futuro colectivo, proteger derechos y garantizar que los valores democráticos perduren.
Primeros golpes a Trump en Estados Unidos
01 Junio 2025
Que Estados Unidos vuelva a ser Estados Unidos.
Que vuelva a ser el sueño que solía ser.
Que sea el pionero en la llanura
Buscando un hogar donde él mismo sea libre.
Langston Hughes
Por Octaviano Lozano Tinoco
La euforia inicial por el regreso de Donald Trump a la presidencia se desvanece, dando paso a una resaca que sacude los cimientos de Estados Unidos. Su popularidad ha disminuido constantemente desde que asumió el poder el 20 de enero. Según el Pew Research Center, su aprobación cayó de un promedio del 49% a principios de febrero a un 43.3% el martes 29 de abril, justo antes de cumplir los primeros 100 días de su segundo mandato.
El miércoles 28 de junio, dos eventos golpearon al trumpismo: la renuncia de Elon Musk al gobierno, tras fracasar en su intento de recortar el gasto federal, y la decisión de un tribunal federal que bloqueó los aranceles de Trump bajo la Ley de Poderes Económicos de Emergencia, cuestionando una de sus políticas económicas clave.
Musk, considerado un aliado clave de Trump, reunía a algunos de los principales magnates estadounidenses. El dueño de Tesla abandonó su rol como asesor principal tras liderar iniciativas para reducir la burocracia federal. Su salida pone fin a un capítulo marcado por despidos masivos, la eliminación de agencias y numerosos litigios. Aunque generó controversia, Musk logró menos de lo esperado en Washington.
Inicialmente, Musk propuso recortar 2 billones de dólares del gasto federal, pero ajustó su meta a 1 billón, equivalente a 150,000 millones. Frustrado por
la resistencia, chocó con funcionarios de la administración Trump, quienes se opusieron a sus planes de reestructurar departamentos. Su rol en el Departamento de Eficiencia del Gobierno (DOGE) siempre fue temporal, y Musk anunció que volvería a enfocarse en Tesla y SpaceX.
En una publicación en X, Musk confirmó su salida: “Agradezco al presidente @realDonaldTrump
por la oportunidad de reducir el gasto innecesario. La misión de @DOGE
se fortalecerá con el tiempo”. Un funcionario de la Casa Blanca corroboró su partida.
Un día antes, Musk criticó en CBS el proyecto de ley insignia de Trump, que combina recortes fiscales con controles migratorios más estrictos. Lo calificó como un “proyecto de gasto masivo” que aumenta el déficit y contradice los objetivos de DOGE. “Un proyecto puede ser grande o hermoso, pero no sé si ambos”, afirmó.
Trump defendió su agenda, admitiendo que no está satisfecho con ciertos aspectos, pero sugirió posibles ajustes. “Veremos qué pasa”, declaró. Algunos republicanos, como el senador Ron Johnson, comparten las preocupaciones de Musk. Johnson señaló en Milwaukee que la oposición podría frenar la legislación hasta que se priorice la reducción del gasto.
El presidente de la Cámara, Mike Johnson, agradeció a Musk y prometió más recortes, destacando que la Cámara está lista para actuar sobre las propuestas de DOGE. La Casa Blanca enviará al Capitolio un paquete de rescisión para cancelar gastos, incluyendo 1,100 millones de la Corporación de Radiodifusión Pública y 8,300 millones en asistencia exterior.
Musk expresó su frustración con la burocracia federal en una entrevista con The Washington Post: “Es mucho peor de lo que pensaba. Es una batalla cuesta arriba mejorar la situación en Washington”. También anunció que reducirá su gasto político, afirmando: “Ya he hecho suficiente”.
Tras invertir 250 millones de dólares en la campaña de Trump, Musk fue un aliado cercano, luciendo sombreros de campaña y promoviendo la reducción del gasto como una crisis existencial. Trump lo elogió como “un gran estadounidense” y apoyó a Tesla durante una caída en sus ventas.
No está claro si las críticas de Musk influirán en el debate legislativo. Durante la transición, fomentó oposición a un proyecto de gasto que evitó un cierre del
gobierno. Ahora, su salida podría envalentonar a republicanos como el senador Mike Lee, quien insiste en que el Senado fortalecerá la legislación.
La Oficina de Presupuesto del Congreso estima que el proyecto de ley aumentará los déficits en 3.8 billones de dólares en una década, aunque los recortes a Medicaid y otros programas ahorrarían 1 billón. Los republicanos creen que el crecimiento económico compensará el déficit, pero analistas externos proyectan un aumento de 3 billones en la deuda, incluyendo intereses.
Por otro lado, un tribunal federal bloqueó los aranceles de Trump bajo la Ley de Poderes Económicos de Emergencia. El fallo, emitido por el Tribunal de Comercio Internacional, responde a demandas que argumentan que los aranceles exceden la autoridad presidencial. Trump defendió estas medidas como una herramienta para repatriar empleos y reducir el déficit comercial, usándolas para presionar a otros países. Sin embargo, el tribunal dictaminó que las órdenes arancelarias globales violan la ley. La administración apelará, pero el fallo limita temporalmente la capacidad de Trump para imponer impuestos a las importaciones sin aprobación del Congreso.