ZUMPANGO, ESTADO DE MÉXICO, 11 de marzo de 2024.- A las afueras de Ciudad de México pescadores de esta ciudad cuentan que antes podían conseguir kilos de mojarras y carpas en la Laguna de Zumpango, donde ahora hay botes abandonados por la sequía, uno de los múltiples síntomas de la crisis hídrica que padece México incluida la capital y sus municipios conurbados, donde viven unos 20 millones de personas.
“Antes aquí era muy bonito, como un paraíso, pero ahora esta seco. No hay agua ni peces, y pues dan ganas hasta de morirse”, comentan pescadores de la región que antes pescaban aquí, pero ahora deben comprar el pescado en la Central de Abastos.
Para subsanar esta sequía, se perforan nueve pozos de bombas para extraer agua de nueve pozos de 300 metros de profundidad, a fin de suministrar agua a Ciudad de México, donde la escasez se hace sentir desde inicios de año.
Natalia Seguín de la organización Redes de Agua, denunció que se ha permitido que el agua sea acaparada por concesionarios hasta por 50 años, para extraer el líquido en grandes volúmenes, sin importar que la población sufra escasez del líquido.
La capital del país y su zona metropolitana han sufrido desde hace meses por constantes cortes de agua, que los obligan a comprarla a los piperos o esperar a que las pipas gubernamentales les lleven un poco de líquido.
Esta sequía ha provocado que los habitantes construyan enormes cisternas para almacenarla o bombas para “jalar” el agua de la red.
2023 fue el año más seco registrado en México desde 1941, según el servicio meteorológico nacional la sequía disminuyó los niveles de las represas que alimentan al sistema Cutzamala, que aporta 25% del agua del valle de México.
Actualmente el Sistema Cutzamala se encuentra en un nivel crítico de 38% de su capacidad esto es parte del cambio ambiental global.
La Laguna de Zumpango es un cuerpo de agua ubicado en el Estado de México, conocido por su importancia ecológica y como hábitat para aves migratorias.
Recientemente ha enfrentado desafíos significativos debido a la sequía, lo que ha afectado su biodiversidad y ha provocado incendios en áreas que antes estaban sumergidas.
Además, se han realizado esfuerzos de limpieza para retirar lirios acuáticos y mejorar la condición del embalse.
Históricamente, la laguna ha sido un recurso vital para la región, pero su extensión se ha reducido considerablemente desde el siglo XVII debido a proyectos de ingeniería hidráulica destinados a prevenir inundaciones en la Ciudad de México.
En la actualidad, la laguna es técnicamente un vaso regulador con una capacidad de 100 millones de metros cúbicos de agua y una superficie aproximada de 1853 hectáreas. |