* El Rostro Sanguinario y Violento de México
Por ELVIA ANDRADE BARAJAS
--- VIII Parte --
MEXICO, DISTRITO FEDERAL, 24 de enero de 2011.- El 1 de diciembre de 2006 entro al Congreso de la Unión por la puerta de atrás resguardado por las fuerzas federales y del Ejército Mexicano. Entre gritos de repudio se colocó la banda presidencial, con lo que marcó su línea autoritaria y valiente. Se auto proclamó presidente del empleo y declaró la guerra al narcotráfico, que inició 25 días después, y de entonces a la fecha México se tiñó de sangre.
Mostró al mundo el rostro más cruel y violento del paìs azteca, ubicándose como uno de los más peligrosos y sanguinarios de la tierra, donde las víctimas mueren en la peor de las formas, “para humillarlo y que su alma no descanse ni en el más allá”.
Por eso, a las víctimas del narcotráfico los decapitan, los cercenan y tiran sus cabezas alejadas de sus cuerpos semidesnudos con narco mensajes, los deshacen en acido, los entierran en fosas clandestinos, los mutilan e incendian vivos, entran a sus casas, escuelas, comercios, bares, guarderías, fiestas, campos de futbol, e incluso a las Iglesias.
No respetan ningún lugar, y ya no es garantía andar en grupo, aún a este lo secuestran y matan, como ocurrió con los 72 migrantes de San Fernando, Tamaulipas o los 20 turistas desaparecidos en Acapulco, que luego fueron encontrados muertos en una fosa clandestina.
Los códigos de ética de los narcotraficantes ya no existen, porque el narco se relacionó con el crimen organizado. Por eso, ya no respetan a la familia, ni a los niños, ancianos o mujeres, reveló el presidente Felipe Calderón, a quien diferentes sectores responsabilizan de la violencia que se vive en México a consecuencia de “su guerra contra el narco”.
Ahora rafagean a sus víctimas en grupo, los buscan en sus casas y matan a todos sus ocupantes o van a sacarlos de la misma como ocurrió con el alcalde de Santiago Nuevo Leòn, Edelmiro Cavazos Leal, que encabezó una lista, hasta el 24 de enero de 2011, de 15 presidentes municipales asesinados a manos de alguno de los Carteles del narcotráfico.
VAN MAS DE 34 MIL MUERTOS
Datos oficiales reportan que del 26 de diciembre de 2006 a enero de 2010 la cifra de muertos en la guerra contra el narco es de 34, 612 mil personas, entre las que se contabilizan militares, policías estatales y municipales, políticos, mujeres, niños, periodistas e inocentes, y por supuesto líderes, sicarios, vende drogas de los cárteles Sinaloa, La Familia, El Golfo, Juárez, Los Zetas, Los Beltrán Leyva y de Tijuana, que han escenificado una cruenta lucha entre ellos para lograr el poder y el control de las mismas.
El Cartel de Sinaloa, dirigido por el prófugo Joaquín "el Chapo" Guzmán, se consolidó en los últimos años como el grupo del narcotráfico dominante en México por su capacidad para corromper autoridades y la diversificación e internacionalización de sus actividades, e incluso el gobierno estadounidense ha externado sospechas de que el presidente Felipe Calderòn Hinojosa sostiene esta guerra, para favorecer al capo mexicano.
El político michoacano niega apoyar al Chapo y ha revirado acusando a Estados Unidos de ser el responsable de lo ocurrido en México, “porque es el principal consumidor de la droga que se elabora en el país. Además de que alienta el tráfico de armas entre los narcos mexicanos, para se combatan entre si, llegando a excesos de violencia y crueldad.
Calderón aceptó que 2010 fue el año más violento con 15.273 decesos, tan sólo en ese período, en el que las muertes relacionadas con el narcotráfico subieron un 63%. En 2009, hubo 9.616 asesinatos de este tipo, informó el vocero federal de temas de seguridad, Alejandro Poiré, al presentar una base de datos sobre los crímenes relacionados con el narcotráfico, principalmente en enfrentamientos entre la banda de los Zetas y su antiguo aliado, el Cartel del Golfo, ocurridos, cerca de la mitad, en tres estados norteños: Chihuahua, Sinaloa y Tamaulipas.
Detalló que en los cuatro años de mandato de Calderón se instruyeron más de 540.000 averiguaciones previas de las cuales a 400.000 se le dio curso ante los jueces, que dictaron 88.000 sentencias de las cuales 82.500 fueron condenatorias.
Se han extraditado a una 400 personas y se han repatriado a 90; se han incautado 51.000 millones de dosis de cocaína, marihuana y heroína, lo que a precios de mercado habría alcanzado un precio de unos 11 mil 174 millones de dólares. Se han desmantelado 741 laboratorios y 23 fábricas en distintas zonas del país
Actualmente la PRG persigue a un promedio de los 200 narcotraficantes que liderean las diferentes organizaciones criminales en el país, y de ellos 24 son considerados como de alta peligrosidad por lo que en el Programa de Recompensas se ofrecen hasta 30 millones de pesos, por cada uno.
30 MILLONES POR LOS MAS BUSCADOS
A la fecha de los 24 más buscados, 10 han sido capturados o abatidos por las fuerzas federales.
Entre los líderes arrestados, en los últimos 12 meses, están:
Carlos Beltrán Leyva, hermano del jefe de uno de los principales carteles de la droga de México, detenido en Sinaloa el 2 de enero de 2010. Carlos es hermano de Arturo Bertrán Leyva, quien fue asesinado el 16 de diciembre de 2009 en Cuernavaca, junto con otros cuatro miembros de su banda en una batalla con soldados del Ejèrcito.
José Antonio Medina, alias "Don Pepe", detenido en marzo de 2010 en Michoacán
Eznel Cortés del cártel de los Beltrán Leyva, arrestado en la Ciudad de Mèxico en junio de 2010, junto con miembros de su banda y un arsenal de armas.
Luis Carlos Vázquez, alias "El 20", pistolero del cártel de Juárez, el 25 de julio de 2010.
Ignacio Coronel Villarreal, alias Nacho Coronel, figura clave en la banda de narcotraficantes de Sinaloa, asesinado el pasado 29 de julio cuando trataba de escapar durante una incursión del ejército fuera de la ciudad occidental de Guadalajara.
Héctor Jesús Flores, alias "Adán" y otros miembros del cártel de Sinaloa que había secuestrado a cuatro periodistas en Durango, arrestado el 26 de julio de 2010.
Edgar Valdez Villareal, alias 'La Barbie', del cártel Beltrán Leyva, fue capturado en la comunidad de Salazar, Estado de México, el 31 de agosto de 2010.
Sergio Enrique Villarreal, alias "El Grande", del cártel Beltrán Leyva, uno de los hombres buscados más México, arrestado en septiembre de 2010.
El diputado mexicano Julio César Godoy Toscano fue acusado el 23 de septiembre de 2010 de "presuntos vínculos con el crimen organizado" - supuestamente con el narcotráfico banda "La Familia" .Recientemente se le quito el fuero y esta prófugo, lo que lo convierte en uno de los màs buscados.
Gallegos Castrellón también conocido como "El Farmero", líder de la banda de narcotraficantes "Los Aztecas", arrestado el 28 de noviembre de 2010.
Edgar Jiménez Lugo alias "El Ponchis", presunto miembro del cártel de drogas del Pacífico Sur, arrestado en Cuernavaca, Estado de Morelos, México, el 2 de diciembre de 2010.
Nazario Moreno González, alias "El Chayo" o "El Doctor", supuesto líder de "La Familia Michoacana", uno de los màs sanguinareos fue abatido en un tiroteo el 14 de diciembre de 2010.
Flavio Méndez Santiago (C), alias "El Amarillo" (The Yellow), fundador y miembro de la banda Los Zeta, detenido, el 18 de enero de 2011.
Esto hombres y otros que aún están libres son presuntos responsables de crueles crímenes que han sorprendido al mundo, por su marca sanguinaria e inesperada.
El 31 de enero de 2010 un grupo de sicarios de 15 a18 hombres armados irrumpieron en una fiesta en el barrio de Salvarcar en Ciudad Juárez, y rafagearon a sus asistentes, matando a 11 jóvenes e hiriendo a 17 más.
El hecho consternó a la sociedad mexicana e internacional, y desde Juárez hasta el Distrito Federal decenas de jóvenes realizaron manifestaciones contra la narcoviolencia que se apoderó de México, y por la que los jóvenes gringos dejaron de pasar al lado mexicano, para beber y divertirse en los bares de esa ciudad fronteriza.
Así empezaron a quedar desiertos bares como Club Kentucky, Steve McQueen y Marilyn Monroe, que están al borde de la quiebra.
No sólo los bares de Juárez han sido afectados por el narcotráfico, también lo son infinidad de comercios, escuelas e incluso iglesias, que son renteadas por sicarios, que al no recibir ‘su mensualidad’ han cumplido las amenazas de incendiar los negocios, como ocurrió el 3 y el 7 de abril en Valle de Juárez, donde quemaron casas, guarderías hasta la Iglesia, por lo que la población empezó a abandonar el pueblo, pese a que se redoblo el patrullaje de de la Policía Federal y del Ejército.
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