Háblame de cocodrilos,
de profetas y de orgías,
abre entera la ventana,
que me quema la saliva.
Luis Eduardo Aute
Por Octaviano Lozano Tinoco
Tantas barbaridades se cometen en México que ya no hay posibilidad para el asombro y es claro que el país donde nací y traté de comprender en los albores de mi vida se esfumó en la niebla y ahora sobrevivo en un monstruo de mil cabezas, difícil de identificar y cuya frazada de violencia poco a poco nos envuelve a todos.
Es inaudito lo que pasa en México y nada de lo actual se compara con algún episodio de nuestra historia reciente.
Ni siquiera los tiempos de la guerra sucia de la década de los sesentas y setentas tiene algo que ver con ésto, porque “los malos buenos y los buenos malos” parecen que busca un solo objetivo: que el país se quede como está y la violencia es un pretexto cruel para intimidar y aumentar la miseria de los mexicanos.
Porque la violencia omnipresente y los bajos salarios son dos puñales que atosigan la garganta de los mexicanos y al parecer nada avizora un nuevo horizonte.
Y en estos años trágicos es posible levantar el teléfono y escuchar la voz de Calderón hablando de las bondades de su labor como presidente ¿?, antes de lo que será su cuarto informe de gobierno. Eso si es moderno, confesarnos antes de la muerte.
¿Pero cómo puede virar México y dejar la montaña rusa de miedo y violencia? Es una pregunta difícil
de resolver, porque si los acaudalados regiomontanos beneficiados directos de la rapiña nacional deciden poner pies en polvorosa y dejar Monterrey para mudarse a Texas, porque la violencia golpea sus puertas, quiere decir que la crisis en el país no tiene solución.
Ya no esperan los tres batallones del ejército que pidieron para enfrentar el despiporre de muerte que tiene en sus calles. Mejor “ahí nos vemos” parecer decir. Incluso el gobernador Roberto Medina ya sacó a su familia del estado.
¿Cómo puede virar México y salir de este gran atolladero?, no lo sé, quisiera poder imaginar con “nosotros”, todos los mexicanos que empujan por un país mejor, pero no desde la televisión, sino desde abajo.
Hay que imaginar que se puede, que este país es de todos y todos debemos trabajar para salvarlo. Como dice John Lennon
Imagina
Imagina que no existe el Cielo
es fácil si lo intentas
sin el Infierno debajo nuestro
arriba nuestro, solo el cielo
Imagina a toda la gente
viviendo el hoy...
Imagina que no hay países
no es difícil de hacer
nadie por quien matar o morir
ni tampoco religión
imagina a toda la gente
viviendo la vida en paz...
Puedes decir que soy un soñador
pero no soy el único
espero que algún día te unas a nosotros
y el mundo vivirá como uno
Imagina que no hay posesiones
quisiera saber si puedes
sin necesidad de gula o hambre
una hermandad de hombres
imagínate a toda la gente
compartiendo el mundo
Puedes decir que soy un soñador
pero no soy el único
espero que algún día te unas a nosotros
y el mundo vivirá como uno
Yo voy soñando caminos
de la tarde. ¡Las colinas
doradas, los verdes pinos,
las polvorientas encinas!...
Antonio Machado
Por Octaviano Lozano Tinoco
El gobierno mexicano lloriquea ante Estados Unidos y dicen de dientes para afuera que defenderán a los migrantes mexicanos de las arbitrariedades de “los gringos”, que sin duda, cometen todos los días y viven de ese “trabajo esclavo”.
Y lanza bocanadas de voluntarismo contra la ley SB 1070 de Arizona, que ahora se encuentra suspendida en sus disposiciones más racistas y nazis, como ser detenido por la policía debido al aspecto físico de la persona.
Sin embargo, aquí en México se cometen los peores crímenes contra los migrantes que cruzan el país con destino a Estados Unidos, sin que nadie vea ni escuche algo.
Hoy sabemos que las 72 personas asesinadas en un rancho en Tamaulipas, eran indocumentos provenientes de El Salvador, Honduras, Ecuador y Brasil, que iban camino a Estados Unidos.
De acuerdo con lo que aparece en la prensa fueron torturados por presuntos Zetas, quienes les pidieron dinero o unirse a ellos, y al negarse, los masacraron.
Asimismo, el pasado diez de agosto tres centroamericanos, entre ellos una mujer, fueron emboscados y masacrados a garrotazos cuando esperaban abordar el tren en la comunidad de Buena Vista Apasco, del municipio de Macuspana, Tabasco.
Según reportes de prensa, tanto la mujer como los otros dos hombres, de entre 25 y 28 años de edad, tenían virtualmente molidas las cabezas y marcas de sofocamiento en el cuello.
Comisión Interamericana de Derechos Humanos presentó el 22 de marzo en Washington, un informe sobre el secuestro sistemático y generalizado a personas migrantes en México, cometido por el crimen organizado con la complicidad de autoridades como producto de una política migratoria restrictiva y con escasa perspectiva de derechos humanos.
Denunció que 9 mil 758 personas migrantes fueron secuestradas en México este año en un lapso de seis meses, sin que las autoridades pudieran hacer algo.
Lo que pasa en nuestro país es un acto criminal, lo que muestra que México es un estado fallido, porque nadie ve nada, nadie escucha qué pasa con los migrantes que caminan por el territorio mexicano hacia Estados Unidos.
Con estos hechos de horror, se desdibuja la estrategia del gobierno panista en defensa de los migrantes mexicanos en Estados Unidos, porque allá, pese a todo, están entre “algodones”, en comparación de lo que pasa aquí, donde “los ilegales” son secuestrados y asesinados.
La Ley SB 1070 que promulgó la gobernadora de Arizona, Jean Brewer, la más dura en cuestiones migratorias Estados Unidos, no es nada con el estado sin ley que se vive en México.
El argumento del gobierno mexicano será que es la delincuencia quien realiza tales atropellos contra los migrantes, pero la principal tarea del Estado es brindar seguridad a todas las personas que estén en su territorio y esto no lo hace.
El gobierno mexicano es culpable por omisión de esta tragedia humana, que viene ocurriendo desde hace muchos años y nada hace para evitarlo.
Surgirá un nuevo orden
y sus hombres serán
los sacerdotes del hombre,
y cada hombre será
su propio sacerdote.
Walt Whitman
Por Octaviano Lozano Tinoco
En la reciente columna “Reflexiones” del líder cubano Fidel Castro, donde comenta el libro de Andrés Manuel López Obrador “La mafia que se adueñó de México y el 2012” y según la ultraderecha mexicana da al tabasqueño el “beso del diablo” al manifestarle su simpatía, también explica cómo Estados Unidos se ha devorado a nuestro país.
Señaló que Washington usó ideologías como el neoliberalismo para arrebatarle a México sus recursos naturales.
“Conocía, como otros dirigentes políticos, cómo Washington había elaborado las ideas del `neoliberalismo’ que vendió a los países de América Latina y el resto de los países del Tercer Mundo como la quintaesencia de la democracia política y el desarrollo económico (…) . Pero nunca tuve una idea tan nítida de la forma con que el imperio utilizaba esa doctrina para destrozar y devorar las riquezas de un importantísimo país, rico en recursos naturales y hogar de un pueblo heroico que tuvo cultura propia desde antes de la era precristiana, hace más de dos mil años”.
Sin embargo, antes que Castro ya en 1855, el Jefe Seattle de la tribu Suwamish, explicaba la voracidad de Estados Unidos en una carta al presidente de ese país, Franklin Pierce, para responderle a la oferta de comprarle los territorios del noroeste de los Estados Unidos que hoy forman el Estado de Washington.
Y decía, o mejor dicho, dice el Jefe Seattle: ““El Gran Jefe Blanco de Washington ha ordenado hacernos saber que nos quiere comprar las tierras. El Gran Jefe Blanco nos ha enviado también palabras de amistad y de buena voluntad. Mucho apreciamos esta gentileza, porque sabemos que poca falta le hace nuestra amistad. Vamos a considerar su oferta pues sabemos que, de no hacerlo, el hombre blanco podrá venir con sus armas de fuego a tomar nuestras tierras. El Gran Jefe Blanco de Washington podrá confiar en la palabra del jefe Seattle con la misma certeza que espera el retorno de las estaciones. Como las estrellas inmutables son mis palabras.”
Más adelante agrega: “¿Cómo se puede comprar o vender el cielo o el calor de la tierra? Esa es para nosotros una idea extraña”.
“Por lo tanto, vamos a meditar sobre la oferta de comprar nuestra tierra. Si decidimos aceptar, impondré una condición: el hombre blanco debe tratar a los animales de esta tierra como a sus hermanos”.
Y continúa: “Ustedes podrán pensar que lo poseen, como desean poseer nuestra tierra; pero no es posible, Él es el Dios del hombre, y su compasión es igual para el hombre piel roja como para el hombre piel blanca.
Y ve lo inevitable: “Cuando nos despojen de esta tierra, ustedes brillarán intensamente iluminados por la fuerza del Dios que los trajo a estas tierras y por alguna razón especial les dio el dominio sobre la tierra y sobre el hombre piel roja.
Este destino es un misterio para nosotros, pues no comprendemos el que los búfalos sean exterminados, los caballos bravíos sean todos domados, los rincones secretos del bosque denso sean impregnados del olor de muchos hombres y la visión de las montañas obstruida por hilos de hablar. ¿Qué ha sucedido con el bosque espeso? Desapareció. ¿Qué ha sucedido con el águila? Desapareció. La vida ha terminado. Ahora empieza la supervivencia”.
Y así Castro y el Jefe Seattle se comunican en el tiempo y comprende la voracidad de Estados Unidos que invade países como Irak y Afganistán, o mantiene a países débiles como México en un estado de violencia para seguir controlando sus recurso, con el pretexto de luchar contra las drogas.
Padre nuestro que estás donde estás
Rodeado de ángeles desleales
Sinceramente: no sufras más por nosotros
Nicanor Parra
Por Octaviano Lozano Tinoco
Con la fuerza del Talibán mexicano más arcaico y fanático hemos topado. Nada que ver con el de las estepas afganas que al menos le ponen el pecho a las balas y su cuerpo “de blanco” a los misiles gringos teledirigidos en su lucha por la independencia de su país.
No, nada que ver con ellos, que si bien se encomiendan a otro Dios, en su osadía por la libertad encuentran muchas veces la muerte.
No, nada que ver con ellos, porque éstos aquí esconden narcolimosna, niños bajo las sotanas y el pecado como castigo divino, contra los que osean ser felices fuera de sus cánones.
Se meten en lo que no les importa, o sea en la vida privada de la gente de bien, y confiesan y perdonan a los malvados.
Son fácil de detectas, siempre andas con enaguas y están alborotados hoy en día porque prohombres como Calles o Juárez no estás dirigiendo este país; sino descafeinados que comulgan y se confiesan.
Esos miembros del Talibán se dicen cardenales y son dirigidos por Norberto Rivera y Juan Sandoval Iñiguez, que andan siempre con el “!Jesús en la boca!” y previo a los comicios presidenciales del 2012 presionan y espantan con el petate del muerto con repetir en México las condiciones fascistas que permitieron la guerra cristera de los años 20 de siglo pasado.
Buscan seguir ganando espacios y no regresar nunca al curato, donde jamás debieron haber salido.
Sandoval Iñiguez alardea y provoca. Dice que el jefe del gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard “maiceó” –sobornado- a la Corte Suprema de Justicia para aprobar la adopción de niños por matrimonios del mismo sexo.
“Marcelo Ebrard (jefe de Gobierno del Distrito Federal) junto con organismos internacionales maiceó a los magistrados (sic) de la Suprema Corte, que recibieron dádivas”, aseveró.
El segundo golpe lo lanzó el vocero de la arquidiócesis, Hugo Valdemar, -quien obedece a Rivera -quien dijo que la posibilidad de la adopción homosexual como "una atrocidad", porque además de poder ser discriminado, podría generarle "problemas psicológicos" a los niños.
Además, el exaltado vocero llamó a los fieles "para que hagan las acciones que tengan que hacer" en contra del jefe de gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard.
"Él y su gobierno han creado leyes destructivas de la familia, que hacen un daño peor que el narcotráfico. Marcelo Ebrard y su partido el PRD se han empeñado en destruirnos", sostuvo el sacerdote y agregó que la Iglesia no hará nada "porque no le compete".
Así el Talibán de México se inmola y vociferan pecado, pecado y llama a lo más oscuro y fascistas de los mexicanos para que los posesione frente a las futuras elecciones del 2012.
A ellos no les importa la pobreza, ni la violencia ni como encontrar soluciones para el país ni ponerse en carne viva con los necesitados, sino salvar las almas y subirse en la Atalaya de la moral para señalar al pecado.
Ebrard por su parte intentan repetir desafuero de Andrés Manuel López Obrador y ganar adeptos para la compaña de 2012, con su demanda por daño moral contra Sandoval, que dice ser Cardenal de Guadalajara, y Valdemar, vocero de la arquidiócesis.
Sin embargo, el jefe del gobierno es un accidente en esta maniobra de la iglesia católica, cuyo mensaje va directamente al gobierno de Felipe Calderón –que guarda un silencio cómplice- y al puntero del PRI, Enrique Peña Nieto, sobre sus mandamientos si quieren el apoyo del Talibán católico mexicano.
La historia de los días Hermandad Soy hombre: duro poco y es enorme la noche. Pero miro hacia arriba: las estrellas escriben. Sin entender comprendo: también soy escritura y en este mismo instante alguien me deletrea. Octavio Paz
Por Octaviano Lozano Tinoco
Dicen los que saben que México es un país surrealista, donde todo puede pasar de manera irracional y poco común, producto de los sueños, del inconciente.
De tal manera que nuestra formar de ver la realidad e interpretarla es lo que imaginamos o soñamos, por lo que damos una gran vuelta, a veces nos regresamos, para enfrentar cualquier asunto.
Es tanto como querer pasar un elefante por la boca de una botella, plantar amapolas en la luna, llevar serenata a una vaca o subir una escalera con las manos.
Quizá los ejemplos sean torpes para tratar de entender esa corriente cultural, pero si en México a unos huesos “patrios” se le rinde honores por las calles de la ciudad, si hay 28 mil muertos y se afirma que van ganando una “guerra”, si los curas acusados de pedófilos se atreven a dictar cátedra de moral y buenas costumbres, algo en el país debe ser surrealista.
En este México poco sensato que se vuelve trágico, es posible ver también los desfiguros de un expresidentes que pasará a la historia como el más incapaz de la historia reciente, sí me refiero a Vicente Fox, dando fórmulas de hacer y deshacer en el país, cuando sus torpezas nos tienen en este hoyo.
Y todo es un estruendo de voces que adormecen los oídos de la gente y le hace creer que las situaciones del país son las correctas y bueno, en sentido de destinto, piensa así somos y ni modo, lo acepta, porque además: “Aquí nos todo vivir”.
Es muy grande la puerta del surrealismo en México que llega hasta el extremo de que el líder cubano Fidel Castro mete la cuchara en el país y saca a cuento el asunto de los video escándalos, donde Carlos Ahumada, como el villano, Rosario Robles, como la novia joven, Carlos Salinas, Vicente Fox y Diego Fernández de Cevallos como la mafia, son los protagonistas de este complot.
Sin olvidar a Andrés Manuel López Obrador (AMLO) como el héroe de una farsa, que según Castro le robaron los comicios del 2006 por medio de un fraude electoral.
El “Beso del Diablo” de Castro a AMLO cuando dice que será el político con más estatura ética cuando finalice el neoliberalismo en México, que impuesto por Estados Unidos ha robado las riquezas del país.
Sin duda dará parque a la ultraderecha para golpear más al tabasqueño, pero será un claro mensaje con el fin de que no se “descafeíne” y planteé con firmeza su política. Es decir, que sea un líder con “garras” y pueda así realizar las grandes transformaciones que necesita la nación.
A Castro el gobierno mexicano respondió “tembloroso” diciendo que el líder cubano ataca las instituciones del país y espera que haya algún día elecciones libres en Cuba y se respeten los derechos humanos.
Surrealismo más puro: ¿elecciones como las que hubo éste años para ser gobernador en Durango, Veracruz, Hidalgo, por citar algunos?.
¿Se puede hablar de respeto a los derechos humanos después de que hay en México 7 millones de jóvenes sin trabajo ni estudio. Después de 28 mil muertos? Sin duda surrealismo puro.
Y así la historia de los días sigue hasta el infinito.
El caminar de palabras huecas, conforman en México el delirio de los días, donde su clase político-empresarial se juega a los dados, en un 2012 adelantado, los despojos de la nación.
El soliloquio del bla, bla, bla crece e inundad los noticieros de televisión o de radio, los espacios en los periódicos y los portales en Internet.
El bla, bla, bla es sin duda un mensaje cifrado, que para la gente debe ser el siguiente: nada cambiará, todo será igual en el 2012, en el 2018 o en el 2025. Sin importar el color del partido.
Y se hacen reuniones para hablar y hablar; reconocen errores y no sé que más, pero el buldózer que transformar el país en un camposanto no deja de trabajar ni un segundo.
En otro escenario los empresarios ganan licitaciones en el gran negocio de este siglo: las telecomunicaciones.
Y más bla, bla, bla y los multimillonarios compran una casa en Nueva York con un costo de 40 millones de dólares, con dinero sacado del sudor de millones de mexicanos. Y eso no les importa, piensan que el dinero es suyo y puede hacer con el un papalote.
Y más bla, bla, bla sobre la justicia social y se responsabiliza a los trabajadores de “ganar mucho” y por eso llevan a la quiebra a las empresas.
¿Ganar mucho en relación con quién, con Slim, Azácarra o Salinas Pliego? Puro bla, bla, bla
esa es la tónica de la sinrazón.
Bla, Bla, Bla y la justicia que no aparece. Los niños
quemados en la guardería ABC, los asesinatos por doquier, los mineros caídos en Pasta de Conchos, el encarcelamiento injusto de militantes de San Salvador Atenco, de las mujeres mazahuas en Querétaro y todas la injusticia que se suma día con día en un carrusel al infinito.
La política es bla, bla, bla y más bla, bla, bla.
Los reporteros hacen una macha contra la inseguridad, mientras mueren más por hambre a causa de los pésimos salarios y despidos sin razón alguna. La inestabilidad laboral es la verdadera bomba de tiempo que secuestra el futuro de los profesionales de la pluma.
Más bla, bla, bla cuando se dicen que México es un país de instituciones y que es otro con la transición política del 2000, cuando en el poder cambio la Pepsi por la Coca. Puro bla, bla, bla, donde las ideologías –pensamiento político- se hacen puré y se descubre defendiendo sólo el dinero como su lema y bandera de acción política.
México está en el limbo del bla, bla, bla y no hay visos que se pueda articular una palabra integradoras, que de solución a los problemas nacionales.
Comemos bla, bla y más bla todos los días. Lo leemos, lo escuchamos y lo vemos saliendo de la boca de todos los que ejercen el poder en México: curas, políticos, empresarios, líderes de opinión (periodistas millonarios) y fuerzas del orden
Bla, bla, y más bla, bla, bla
Un poema sobre el bla, bla bla para cerrar este artículo.
Bla bla bla bla
Porque hay formas de pasar el día
sufriendo con palabras
mi ignorancia entristece y fertiliza envidias
No puedo ser mago de automáticos léxicos
La cuestión no es para computadoras
humanidad necesita mi angustia
Leo poetas la aflicción me inunda
y cojo mi ignorancia
la escupo
la abofeteo
y al final la beso con lástima
Comprendo que el dilema es duro
Hacer es el problema
No se puede jugar a monedita de oro
y caerle bien a todos
Olvidaba que aquí
nos dan papel de Cenicienta
Eso sí
el zapato de cristal
no es de cualquiera
Somos como un caballo sin memoria,
somos como un caballo
que, no se acuerda ya
de la última valla que ha saltado.
León Felipe
Por Octaviano Lozano Tinoco
Sé que violento una obra maestra del la literatura mexicanos, al utilizar “Recuerdos del Porvenir” como título de esta retahíla de párrafos que buscan tener un sentido.
Pero con la venia de Elena Garro, autora de esa novela, lo uso porque esas palabras retratan muy bien lo que pasa en este dolido país.
Ante tanta calamidad y deshorna que vivimos a diario, nuestra existencia se integra en “Recuerdos del Porvenir”; que explica un futuro imposible de evocar porque simplemente no existe ni se ha puesto siquiera la primer piedra.
En ese limbo se encuentra México, sin estar en un lado ni en otro. Parado en el tiempo y con sus “Recuerdos del Porvenir” taladrando las entrañas del país.
¿No sabemos qué país queremos? ¿Por dónde empezar su nueva construcción legal? ¿Hasta dónde debemos sacrificarnos como ciudadanos para la revolución y evolución que debemos hacer? ¿Cómo diseñar el nuevo país del siglo XXI?
¿Cómo parar la barbarie y un modelo económico que expulsa mexicanos y crea multimillonarios? ¿De qué manera se puede dar justicia a todos, pan, trabajo y seguridad?
Son “Recuerdos del Porvenir” de un país que no está, que ha desaparecido, pero que se piensa y se rememora, como si fuera posible, como si tuviera futuro.
México ya no es más grande que sus problemas, está a punto de no ser un país viable, porque la violencia que viene de abajo y la que viene de arriba; de un costado y de otros chocan pulverizando el futuro.
Los pocos multimillonarios golpeando con su desprecio a los millones de jodidos, que no tiene más esperanza que combatir día con día por su pan: y muchos de ellos, como dicen los curas, se emplean con “la pequeña minoría” para mejor sobrevivir.
Y así estamos en el punto de no retorno. Por ello como señala el poeta Charles Baudelaire, en su poema “Embriagaos”: “Hay que estar siempre ebrio. Todo está allí: es la única cuestión. Para no sentir el horrible fardo del Tiempo, que rompe vuestros hombros y os inclina hacia la tierra, hay que embriagarse sin cesar.
¿Pero de qué? De vino, de poesía o de virtud, a vuestra guisa.
Y si alguna vez, sobre las gradas de un palacio, sobre la hierba verde de un foso, en la soledad melancólica de vuestra alcoba, os despertáis, la embriaguez ya atenuada o desaparecida, pedid al viento, a la ola, a la estrella, al pájaro, al reloj y a todo lo que huye, a todo lo que gime, a todo lo que rueda, a todo lo que canta, a todo lo que habla, preguntadle qué hora es; y el viento, la ola, la estrella, el pájaro y el reloj os responderán: "¡Es la hora de embriagarse! Para no ser los esclavos martirizados del Tiempo, embriagaos, embriagaos sin cesar. De vino, de poesía o virtud, a vuestra guisa".
Porque “La poesía es un arma cargada de futuro”, escribe Gabriel Celaya:
Y agrega:
“Poesía para el pobre, poesía necesaria
como el pan de cada día
como el aire que exigimos trece veces por minuto
para ser, y en tanto somos, dar un "sí" que glorifica.
Porque vivimos a golpes, porque apenas si nos dejan
decir que somos quien somos,
la poesía no puede ser sin pecado un adorno.
Estamos tocando fondo.
Maldigo la poesía concebida como un lujo
cultural por los neutrales
que, lavándose las manos, se desentienden y evaden.
Maldigo la poesía de quien no toma partido hasta mancharse.
Hago mías las faltas. Siento en mí a cuantos sufren
y canto respirando.
Canto y canto, y cantando más allá de mis penas
personales, me ensancho”
Y así estamos colgados de la luna de la poesía para superar “Los Recuerdos del Porvenir” de un país que no existe y ha dejado de latir.
defender la alegría como un derecho
defenderla de dios y del invierno
de las mayúsculas y de la muerte
Mario Benedetti
Por Octaviano Lozano Tinoco
En un lejano país retacados de nopales, como decían antes los de más antes, había un mandatario que gobernaba como espejo de lo que hizo un antiguo líder mayor en el norte imperial.
Todos lo conocían como el pequeño León, porque se había quedado con las mañas y procedimientos de su ex homólogo, aquel León gigante que inventó una guerra para consolidar su poder y robar las riquezas de otra nación.
Impuso también la lógica del terror a sus conciudadanos y del enemigo en casa, donde todos eran malos hasta que no comprobaran lo contrario. Y era mejor matar que hacer justicia o perdonar.
Es prudente, decía a la gente, espiar al vecino y denunciar cualquier cosa extraña que observen en sus barrios, porque los malos están en todas partes.
Ese León imperial había llegado al poder con poca claridad en la justa electoral y sabía de la urgencia de encontrar un enemigo que desviara la atención de la gente y así consolidó su poder con la tarea titánica de la guerra.
Mintió para planear la invasión de un país y los medios de comunicación replicaron la mentira, que por un tiempo se convirtió en una verdad si más. Ese pueblo fue masacrado y destruido.
Convocó a los ciudadanos a enfrentar la cruzada contra los “infieles”, que buscan acabar con nuestra civilización, y así perdurar como el pueblo elegido por Dios.
Con el paso de los años, hubo miles de muertos, odios encendidos y una violación del Estado de derecho y de las leyes más elementales.
Después, se comprobó que todo fue mentira y que el León imperial había usado el rencor para mantenerse en el poder y la violencia como la moneda de cambio que justificaba su palabra. Y así cumplió su mandato con la mentira como llave.
Y ahora un pequeño León, en un país lejano retacado de nopales, replica su política y como espejo hace lo que el León imperial hacía para conservar el poder y mantenerlo más allá de los tiempos. Se recuerda que también llegó al poder cuestionado por un proceso electoral amañado.
Igual que el otro, identificó un enemigo y lanzó una cruzada militar –que llamó guerra- contra esa “minoría de malos” que intentan dañar al país, pero lo hizo sin autorización de nadie. Como se dice comúnmente, fue por sus “pistolas”.
Y el campo se llenó de muertos, que nadie supo quiénes eran ni quién les había quitado el existir. El miedo y la violencia se democratizo en el país; o sea les pegaba a todos por igual con un sentido democrático que jamás se había visto por esos lares.
Todo se pudrió y la gente tenía miedo. El pequeño León desde su atalaya convocaba a la gente a sumarse a la guerra contra los malos, que tiene el don de la ubicuidad y podrían aparecer detrás de cualquiera.
Incendiar el país para combatir “el mal” era la tarea del pequeño León; conservar el poder era su objetivo. Lo demás poco importaba.
Esto es sólo una fábula de lo que sucedió en un país lejano retacados de nopales, nada tiene que ver con la realidad. Es una historia vieja y enmohecida.
Porque como dice el poeta español y universal José Hierro en “Destino alegre”, nuestra meta en la vida es otra y no reírle a la muerte, sino a la vida.
Y el poeta canta y cuenta:
“Nos han abandonado en medio del camino.
Entre la luz íbamos ciegos.
Somos aves de paso, nubes altas de estío,
vagabundos eternos.
Mala gente que pasa cantando por los campos.
Aunque el camino es áspero y son duros los tiempos,
cantamos con el alma. Y no hay un hombre solo
que comprenda la viva razón del canto nuestro.
Vivimos y morimos muertes y vidas de otros.
Sobre nuestras espaldas pesan mucho los muertos.
Su hondo grito nos pide que muramos un poco,
como murieron todos ellos,
que vivamos deprisa, quemando locamente
la vida que ellos no vivieron.
Ríos furiosos, ríos turbios, ríos veloces,
(Pero nadie nos mide lo hondo, sino lo estrecho.)
Mordemos las orillas, derribamos los puentes.
Dicen que vamos ciegos.
Pero vivimos. Llevan nuestras, aguas la esencia
de las muertes y vidas de vivos y de muertos.
Ya veis si es bien alegre saber a ciencia cierta
que hemos nacido para esto.”
Unámonos, pues, todos los que hemos nacido en este dichoso suelo
Miguel Hidalgo y Costilla
Por Octaviano Lozano Tinoco
En México es más peligroso trabajar como periodista que en países como Sierra Leona, Ruanda, Bosnia, Irak, Irán, Rusia o Colombia.
Los peligros lo forman los extremos de una pinza integrada por bajos salarios y la violencia que aprietan de manera brutal a los hombres y mujeres que realizan esté oficio, que algunos consideran el más hermoso del mundo.
Esa máquina de tortura social actúa siempre de manera simultánea, no existe un extremo sin el otro, aunque hoy la violencia es más espectacular y gana los espacios en diarios y noticieros.
La falta de prestaciones sociales principalmente en medios electrónicos, bajos sueldos, jornadas excesivas de trabajo sin retribución y abusos de algunas empresas, es también otra forma de agresión y censura.
De no estar, de guardar la pluma y enterrar el oficio, porque el hambre acecha. Sin embargo, esa condición no es importante para la gran prensa.
Es más espectacular hablar de la otra forma de presión, la que se lleva el cuerpo, para decir que la prensa sufre y es agredida, pero de “la muerte lenta” nadie dice nada, cuando te retrasan los pagos y estás comiendo aire.
Es nota decir que “asesinados o desaparecidos”, en esta lista están 38 comunicadores en lo que va del sexenio —diez de ellos en los meses que han transcurridos en 2010—, de acuerdo con estadísticas de Reporteros Sin Fronteras, que contabiliza 69 homicidios de periodistas de 2002 a la fecha y 11 cuyo paradero se desconoce desde 2003. Casi todos están impunes.
Pero también hay otra manera de no estar, de desaparecer, de guardar la pluma y ser periodista, pero no le interesa hablar de eso a la “élite” del periodismo de opinión, que busca una estrategia para “censura” la realidad nacional y hablar del mundo feliz de la “seguridad democrática”.
