*Empieza el golpeteo al PRI; podría ser el ganador en las intermedias de 2021   

Por ELVIA ANDRADE BARAJAS    

CIUDAD DE MEXICO, Estados Unidos Mexicanos, 11 de agosto de 2020.- Como era de esperarse, el ex director de Petróleos Mexicanos en el gobierno del ex  Presidente Enrique Peña Nieto, interpuso hoy una denuncia contra su ex jefe  en la Fiscalía General de la República (FGR) por presuntos actos de corrupción vinculados a la constructora brasileña Odebrecht, que supuestamente entregó sobornos por 100 millones de pesos para financiar la campaña presidencial del mexiquense.   

Con esto, el ex asesor político en la campaña presidencial de Peña Nieto asegura su libertad y cambio de identidad, como testigo protegido del gobierno izquierdista, que lo extraditó de España para utilizarlo como el gatillo que le dé el tiro de gracia al PRI.   

La denuncia Lozoya tiene el propósito de hundir al PRI, mostrándolo como un partido político altamente corrupto, para que fracase en las elecciones intermedias de 2021, en las que se prevé retendrá las ocho gubernaturas que gobierna: Campeche, Colima, Guerrero, San Luis Potosí, Tlaxcala, Sinaloa, Sonora y Zacatecas, sentando un precedente importante para recuperar la Presidencia en 2024, quizá en alianza con el PAN y otros partidos, apoyados en el rosario de desaciertos del gobierno morenista.   

Eso es lo que realmente preocupa al presidente Andrés Manuel López Obrador, aunque pregona que lo único que le importa es acabar con la corrupción que ha lacerado al pueblo mexicano, durante los gobiernos del PAN y del PRI, que derrotó en las elecciones de 2018.   

Pero a lo largo de su administración ha incurrido en una serie de actos que han enojado y desilusionado incluso a muchos de sus seguidores, que abiertamente le han recriminado su mal gobierno, específicamente en cuestiones de seguridad.   

El izquierdista prometió que apaciguaría al país, pero lo ha enardecido más, al grado que la sociedad se hace justicia por propia mano como ocurrió en menos de una semana con el linchamiento de un delincuente en una combi, otro en Puebla, otro en Tlacotepec y uno más en Iztapalapa, por citar algunos casos, que son la punta del iceberg de la inseguridad y criminalidad que prevalece en el país.    

Su política de “Abrazos y no Balazos” y eso de que los delincuentes también son humanos, así como sus continuas visitas a Sinaloa, cuna del narcotráfico, ha dado como resultado que el crimen organizado actúe como si estuviera protegido por el gobierno federal, lo que indigna a la población, porque en vez de avanzar en seguridad, se ha retrocedido tanto que México ya parece un país sin ley.    

Igualmente hay un desplome en la economía, empleo, y en salud, materia en la que México es criticado mundialmente por el mal manejo del coronavirus, que según el presidente ha atendido adecuadamente, pero lo desmienten las voces de las víctimas a las que no apoyo con atención médica gratuita, pese a recibir millones de peso para enfrentar la pandemia.   

Lo del avión, lo del aeropuerto, el tener a conocidos corruptos en su gabinete como Manuel Bartlett, Rocío Nahle, Zoé Robledo, Irma Eréndira Sandoval y muchos otros a los que defiende pese a que se conoce su negro historial, son errores que pagará en las urnas.   

Los mexicanos están listos para despedir a Morena, porque llegó al poder para proteger a unos cuantos, no para ver por el bien común.    

Por ello, el golpeteo político contra el PRI ha empezado, porque de retener las gubernaturas que gobierna, fortalecerá a su partido y eso no puede permitirlo el de las mañaneras, porque sabe que para 2024 México se pintará de otro color, mas no de guinda.    

El espectáculo inició con el arresto de Lozoya, su denuncia, hoy, a Peña Nieto y de ahí empezarán a “jalar” a priistas exhibiéndolos como corruptos, entre ellos a Luis Videgaray, a Miguel Ángel Osorio Chong, quien ya se amparó, y a muchos otros.   

La denuncia de Lozoya es parte del acuerdo de colaboración con la justicia mexicana.   

"Este individuo está señalando que hubo una serie de sobornos por una cantidad que pasa los 100 millones de pesos (US$4,4 millones), los cuales fueron fundamentalmente utilizados para la campaña 2012 a la presidencia de la República", informó el fiscal Alejandro Gertz.   

"El que después fue presidente (Peña Nieto) y su secretario de Hacienda (Luis Videgaray) son las personas que le ordenaron que este dinero fuera entregado a varios asesores electorales extranjeros que colaboraron y trabajaron para la campaña", añadió, indicando que el dinero "vino de Odebrecht".   

También denunció que en el gobierno de Felipe Calderón (2006-2012) hubo "una serie de beneficios económicos" a favor de la empresa mexicana Etileno XXI, socia de Odebrecht.   

"Se les dieron una serie de beneficios en los precios de los insumos en los que el gobierno federal tuvo pérdidas muy graves", dijo Gertz, citando la declaración de Lozoya.  

Calderón arremetió de inmediato y dijo que él no había saludado a la mamá del Chapo, lo que sì hizo López Obrador, de quien se dice fue a Culiacán a la fiesta de cumpleaños de Ovidio, hijo de Joaquín Guzmán Loera, a quien en octubre de 2019 ordenó liberar al ser detenido en Culiacán “para evitar una masacre”.  

COMPRA DE VOTOS   

Lozoya también denunció que se usaron 120 millones de pesos (US$5,3 millones) para la "compra de votos"de legisladores para la aprobación de reformas estructurales, entre ellas la Reforma Energética, de 2013 y 2014.   

En este caso el dinero fue entregado "a un diputado y cinco senadores" cuyos nombres no fueron revelados.   

El fiscal dijo que Lozoya señaló a "cuatro testigos, recibos y un video".   

La FGR procederá a revisar las pruebas "y en el caso de que sea procedente, a las personas que él imputa los llamaremos a declarar", explicó el fiscal.   

Lozoya Austin es hasta ahora el único enjuiciado por el escándalo Odebrecht en México.   

El exdirector de Pemex fue vinculado al caso desde el año pasado, pero durante varios meses permaneció prófugo hasta que fue detenido en España en febrero pasado.   

A finales de junio aceptó ser extraditado a México y ofreció entregar información sobre los sobornos, así como identificar a otros exfuncionarios que participaron en la trama.   

Lozoya está acusado por la FGR de haber recibido al menos US$10 millones de la constructora brasileña, así como de construir una red de lavado de dinero para ocultar el origen de los recursos.   

Parte de ese dinero se recibió en 2012 cuando Peña Nieto era candidato a la presidencia de México, y Lozoya coordinador de Vinculación Internacional de su campaña.   

En ese período, según la FGR, Odebrecht entregó US$4 millones para propaganda y actividades electorales.   

En el gobierno de Peña Nieto, Lozoya fue nombrado director de Pemex y bajo ese cargo recibió otros US$6 millones de la constructora.   

Durante la primera audiencia del juicio, el pasado 29 de julio, la Fiscalía General aseguró que los sobornos se entregaron a cambio de la asignación de contratos de obra pública.   

De hecho en 2012 Lozoya ofreció un cargo público al entonces director de Odebrecht en México, Luis de Meneses, en caso de ganar la contienda electoral.   

Para ocultar el origen y destino del dinero Lozoya utilizó prestanombres y empresas fachada, donde inclusive participaron familiares y amigos del acusado.   

En la audiencia del caso los abogados del exdirector de Pemex afirmaron que su cliente "fue utilizado por un aparato de poder conformado por altas autoridades del Estado mexicano".   

Y añadieron que, en su momento, "él procederá a denunciar de manera muy clara y contundente sus nombres, sus cargos y los métodos de instrumentación".   

Inicia investigación   

El fiscal Gertz dijo que la denuncia presentada por Lozoya refiere que parte del dinero entregado por Odebrecht se utilizó para asegurar la aprobación de la Reforma Energética en el Congreso, en 2013.   

Peña Nieto y Videgaray, señala el fiscal, le ordenaron usar los recursos para sobornar a diputados y senadores.   

"Estas dos personas a las que ya ha hecho referencia le dieron instrucciones para que entregara 84 millones de pesos a varios legisladores y a un secretario de finanzas de un partido político", señaló Gertz Manero.   

"Después también le dieron una cantidad superior a 200 millones para dirigirlos a la reforma estructural a través de un enlace".   

Lozoya acompañó su denuncia con recibos y un video, además de nombrar a cuatro testigos añade el fiscal, aunque el exdirector de Pemex deberá presentar pruebas adicionales