Dios mío, casi no he creído nunca en ti, pero siempre te he amado.
Antonio Porchia

Por Octaviano Lozano Tinoco

Nos acercamos a los críticos comicios presidenciales de 2018, con toda una turbulencia en México, con las secuelas de terremotos sin solucionar, sin un procurador general de la república, ni fiscal anticorrupción ni sobre delitos electorales y la renegociación del Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (TLCN) que como tal no es una negociación, sino una imposición por parte de Estados Unidos.

En esto se suma la dura crítica de la Iglesia Católica que con su editorial del domingo que derrumba las banderas del gobierno, sobre las reformas estructurales que solo, dice, han beneficiados a las clases pudientes.

“Una de las causas de la infelicidad de los mexicanos es el pésimo manejo de la economía, pues el crecimiento de ésta no se ve reflejado en los bolsillos de millones de ciudadanos”, aseguró la Arquidiócesis de México, en su el editorial del semanario Desde la fe.

Agregó que se percibe el fracaso de las fórmulas tradicionales propuestas por la clase política cuando lo que tanto se prometió con las reformas estructurales en realidad sólo asoma la cabeza hacia el fracaso y la paupérrima satisfacción para pocos en los que concentran la riqueza nacional.

Las encuestas oficiales como las del INEGI sobre medición de la pobreza han determinado un ligero decremento en cuanto al número de pobres; sin embargo, más de 53 millones de mexicanos viven en pobreza y 12 millones en pobreza extrema, señaló.

Afirmó también que desde la clase empresarial la que, en plena carrera por el poder electoral, da a conocer posibles soluciones de fortalecimiento del Estado de Derecho y seguridad pública.

Aquí lo que se demuestra es la tirantes que existe entre el gobierno y el sector religioso, que ya no ve nada bueno en la administración del presidente Enrique Peña Nieto y busca fincar nuevos vínculos de cara a la justa electoral para el próximo año.

En meses pasados, la Iglesia católica manifestó su rechazo a la posición del gobierno frente a la política exterior del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, porque considera que tendría un efecto negativo en México.

En un inusual editorial, la Arquidiócesis de México arremetió en contra de las nuevas políticas inmigratorias impulsadas por Trump y que implicarían la eventual deportación de miles de migrantes, incluyendo mexicanos, con historial delictivo.

"Lo que hace el señor Trump no es sólo la aplicación de un legalismo inhumano, sino un verdadero acto de terror". Agregó que los mexicanos indocumentados tienen miedo, que sus hijos sufren una verdadera psicosis, mientras las autoridades en México “reaccionan con tibieza, sumisión y sin una estrategia clara”.

Así la iglesia se está separando de un gobierno que da sus últimas patadas de ahogado y se apresta a posicionarse de cara a la próxima justa presidencial del 2018.

"Descubrí que el verdadero México es un país con una constitución y leyes escritas tan justas
en general y democráticas como la nuestra; pero donde ni la constitución ni las leyes se cumplen.
México es un país sin libertad política”
John Kenneth Turner, México Bárbaro, primera publicación 1909

Por Octaviano Lozano Tinoco

Los comicios presidenciales ya están en juego y se ve que la disputa por llegar a Los Pinos será, como siempre ha sido, una frontal lucha a sangre y fuego. Porque si bien se dice que México es un país democrático y de leyes, al final lo bronco sale al primer plano y toma las riendas de la política.

En el Senado vemos como se intenta cerrar el paso del caso Odebrecht en México, la empresa constructora brasileña que operó en toda América Latina con su alforja de dólares bajo el brazo corrompiendo a los gobiernos.

Con el despido de Santiago Nieto Castillo, de la Fiscalía Especializada Para la Atención de Delitos Electorales (FEPADE), por filtrar datos que vinculaban al exdirector de Pemex Emilio Lozoya Austin, en el caso Odebrecht, hizo que ardiera Troya.

La Procuraduría General de la Republica (PGR) corrió a Nieto Castillo por supuestamente violar

un “código ético” de no dar información restringida. Sin embargo, los senadores de oposición salieron en su defensa, para que no sea despedido.

Como siempre, el PRI, en busca de proteger al presidente, intenta confirmar la salida de Nieto Castillo, porque el caso Odebrecht llega hasta el titular de Los Pinos, toda vez que se podría comprobar que con su dinero sucio pudo haber ganar la elección.

Y estamos entre jalones y estirones, lo que deja en claro que la disputa por la presidencia ya inició con Odebrecht.

El cuerno de la abundancia de dinero de la empresa brasileña, que salía de quien sabe dónde, se entregaba a mano de presidentes de la región, para conseguir contratos gubernamentales en sus países. Mientras en América Latina el caso Odebrecht hacia polvoprestigios de políticos y muchos de ellos iban a la cárcel, en México había total silencio.

Desde los expresidentes Lula da Silva, en Brasil; Perú Alejandro Toledo, Alán García, Ollanta Humala; Mauricio Macri y Cristina Fernández, de Argentina; Otto Pérez Molina —preso por otro caso de corrupción—, de Guatemala, y Juan Manuel Santos, de Colombia, fueron señalados de recibir dinero de la empresa brasileña.

Pero Odebrecht ya está aquí y el presidente Enrique Peña Nieto, por medio de su vocero, afirmó que si hubo una reunión entre 2010 y 2013, con sus directivos y sus filiales, pero ninguno de ellos dio recursos a su campaña electoral en 2012.

Aunque el exdirectivo de la empresa brasileña, Luis Alberto de Meneses Weyll, asegurara que una filial de la constructora brasileña acompañara “de tiempo completo” al entonces candidato.

Loyoza, quien se desempeñaba como coordinador de vinculación Internacional del candidato del PRI y después fuera director de Pemex, es la ficha que lo vincula con esa liga de corrupción. Y la campaña por la presidencia ya empezó y que nos agarre confesados, uno nunca sabe

Democracia: es una superstición muy difundida, un abuso de la estadística.
Jorge Luis Borge

Por Octaviano Lozano Tinoco

Está claro que la “bestia negra” para las próximas elecciones presidenciales de 2018 en puerta, será nuevamente Andrés Manuel López Obrador, que dentro de la “lógica” de los continuistas del sistema pasó de ser el peligro del político al estilo del finado Hugo Chávez hasta el lado opuesto con lo que representa ahora Donald Trump, como mandatario de Estados Unidos.

En ese juego perverso de que la continuidad del sistema es el único destino de México y cualquier viraje, aunque sea mínimo, constituye el fin del mundo y la catástrofe para el país, es una muestra del miedo que tiene la clase política-empresarial porque llegue al poder alguien, que al cien por ciento, no esté familiarizado con sus tranzas.

Si votar no le da al pueblo la posibilidad de un viraje en la forma de gobierno no tiene sentido ir a las urnas y sufragar. Para eso existe la democracia para que el pueblo de manera libre elija a sus dirigentes, que tiene la tarea de mandar obedeciendo.

Por eso resulta poco alentador, que Miguel Alemán, hijo del expresidente Miguel Alemán Valdés, que dejó en sus sexenio una estela de impunidad y corrupción, salga izando la bandera con que AMLO es un peligro para el país.

El presidente del foro México Cumbre de Negocios, que se realiza en San Luis Potosí, afirmó que si una democracia no cuenta con demócratas aparecen líderes como Andrés Manuel López Obrador

El presidente nacional de Morena y aspirante presidencial, dijo, todo lo ve negativo y dice que todo está mal.

Esas palabras no ayudan al análisis de lo que pasa en el país, sobre todo porque lo dijo un personaje que debe estar enterado de lo que sucede y solo lo explica en su primera piel: AMLO es el peligro.

No podemos seguir como vamos, porque el choque de trenes ya ocurrió en el país y ahora están saqueando todo lo que dejaron esos destrozos.

Es necesario que el proceso de 2018 sea tan transparente como el agua y promover el voto como única manera de empezar a resolver los grandes problemas nacionales.

Alemán dice que “la reforma que falta en México es la del Estado de derecho. Pero para que entendamos qué es eso, debemos darnos cuenta de qué es la democracia”.

Si fuera así, diputados, senadores y empresarios estarían en la cárcel por graves casos de corrupción, que en México se negocian para que todo siga igual.

Agrega que líderes como López Obrador, que empieza a utilizar las redes sociales y a la

gente que no tiene trabajo para decir que va a cambiar eso o que va a hacer lo otro. Así empezó Donald Trump (presidente de Estados Unidos).

“No digo que López Obrador va a ser igual, digo que no hay programa, hay amenazas; dice que todo está mal, que todo es negativo, no ha dicho cómo lo va a hacer. Vamos a estudiar lo que propone y luego a votar”, declaró Alemán Velasco.

Triste que se aliente el miedo, porque solo crea más división social y encono.

Vino Nuestra Señora, la Tolvanera madre.
Vino y se la comió. Yo andaba por el mundo.
Mi casa fueron mis palabras, mi tumba el aire
Octavio Paz

Por Octaviano Lozano Tinoco

En esa sinrazón que forma la corrupción en México y en el afán del presidente Enrique Peña Nieto por desmarcar a su gobierno de ese mal proceder social, que forma parte del sistema político-económico vigente y de finalizar estallaría el PRI y esa forma de gobierno que ha estado aquí por más de 90 años, es claro que la corrupción permanecerá hasta que el mexicano de la calle, diga “¡Basta ya!” y reconozca al ser humano “honestos y anónimo”.

La corrupción es la savia que nutre al sistema político- empresarial mexicano y no es un hecho cultural como afirmara Peña Nieto en el Foro Impulsando a México, organizado por un diario capitalino.

Al menos corrigió y digo que no era “genético”, lo que nos salvó de que el presidente pensara que la corrupción es algo que los mexicanos ya traemos en la sangre. Lo que demostraría su ignorancia, pero comentar que es culturar no lo acerca a la sabiduría.

“A cualquier cosa que ocurra hoy en día es por la corrupción. Si casi casi si hay un choque aquí, en la esquina, fue la corrupción; algo pasó en el semáforo, quién compró el semáforo que no funcionaba… Hemos tenido los ejemplos de socavones. A ver, pasan en todas partes del mundo, uno señalado, pero ha habido varios más y ahora vimos estos sismos y detrás de cada evento quieren encontrar un responsable, un culpable, y siempre, es decir, es la

corrupción, cuando no necesariamente asiste el que detrás de algún evento, consecuencia de algo, tenga que ver con la corrupción” apuntó el presidente.

Durante su discurso, Peña Nieto insistió en lo expuesto durante un programa convocado bajo el membrete del Fondo de Cultura Económica a finales de agosto, que la corrupción es “un tema cultural”, que no es privativo de México y que se le debe hacer frente con el fortalecimiento institucional. “Me sostengo en lo dicho”, desafió.

En el libro Vecinos Distantes de Alan Riding, periodista brasileño que en la década de los ochentas fue corresponsal del The New York Times en México, afirma que la corrupción proporciona el “lubricante” que permite que los engranajes de la maquinaria política giren, y el “engrudo” que sella las alianzas políticas.

Esto significaría que como no hay seguridad dentro de una burocracia permanente, los funcionarios se ven prácticamente obligados a enriquecerse con objeto de “disfrutar de cierta protección cuando han salido del poder”.´

Más de la mitad de los mexicanos han sobornado a autoridades en el último año para acceder a servicios públicos básicos, de acuerdo con el Barómetro Global de la Corrupción.

Esto coloca a México como el país con mayor corrupción, seguido de República Dominicana, donde el 46% de sus pobladores han pagado sobornos, señala el estudio “Las personas y la corrupción: América Latina y el Caribe”.

Los índices de soborno son sustancialmente inferiores, dice el estudio, en Trinidad y Tobago, donde solamente el 6% de las personas lo pagaron en el mismo lapso.

“México evidencia claramente los más graves índices de corrupción en la prestación de servicios públicos”, según el estudio la mayor corrupción está en el en el caso de escuelas, atención de la salud y documentación personal (del 33% al 39%).

Es decir, la corrupción no es un asunto cultural, es el sistema político empresarial que el PRI ha forjado por más de 90 años.

El historiador Pedro Castro, escribió el libro “Álvaro Obregón. Fuego y cenizas de la revolución mexicana” en donde refiere que al caudillo sonorense "le gustaba exhibirse en público, hablar, contar chistes, buenos chistes".

Y en ese libro se recuperar un de ellos, sobre como perdió su brazo: "A usted seguramente le habrán dicho que soy algo ladrón. Aquí todos somos un poco ladrones. Pero yo no tengo más que una mano, mientras mis adversarios tienen dos. ¿Sabe usted cómo encontraron la mano que me falta? Después de hacerme la primera curación, mis agentes se ocuparon en buscar el brazo por el suelo. Exploraron en todas direcciones, sin encontrar nada. ‘Yo lo encontraré’, dijo uno de mis ayudantes que me conoce bien, ‘ella vendrá sola, tengo un medio seguro’. Y sacándose del bolsillo una [moneda], lo levantó sobre su cabeza. Inmediatamente salió del suelo una especie de pájaro de cinco alas. Era mi mano, que al sentir la vecindad de una moneda de oro, abandonaba su escondite para agarrarla con un impulso arrollador".

Lo que describe muy bien la corrupción de una forma de hacer política, que los empresarios por supuesto han disfrutado. La corrupción es un sistema, no un asunto cultural.

Todo lo que vemos o parecemos es solamente un sueño dentro de un sueño.
Edgar Allan Poe

Por Octaviano Lozano Tinoco

Como siempre la clase política mexicana realizó otro papel de genuflexión con el imberbe primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, quien realizó una visita oficial al país y regresó a su nación sin un reclamo de su posición sobre el TLCAN y la depredación que realizan en México las mineras canadienses.

Todo se fue un pedirle fotos y acercarse para que les diera un saludo, como el regreso del Quetzalcóatl esperando en tierra azteca. Fue indignante la manera en que la clase política vilmente se arrodillo ante un político de cuarta, solo que es galán o carita.

Se les olvido que Trudeau busca convencer al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de que se centre en México como la fuente de los problemas para la reforma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN)

En su reciente encuentro en Washington, el premier canadiense, le dijo a Trump “que Canadá no es el problema de Estados Unidos”.

Antes de la entrevista Trump-Trudeau, la ministra de Asuntos Exteriores canadiense, Chrystia Freeland, afirmó que el premier le explicaría a su contraparte estadounidense que Canadá no es el problema en las conversaciones para actualizar el TLCAN.

“Para recordarle que Canadá es en realidad el mayor mercado para Estados Unidos. Somos su mayor cliente”, aseguró.

Otro punto que pasó de noche entre la clase política mexicana. Canadá controla las concesiones mineras en el país, con siete grandes compañías que dominan el negocio del oro y otros metales.

El país de la hoja de maple tiene en nuestro país un trato privilegiado y se localizan en poblaciones de mayoría indígena.

Entre ellas se encuentran: Metallica Resources en San Luis Potosí; Minefinders en Chihuahua; Great Panther en Guanajuato; BlackFire en Chiapas; Torex Gold en Guerrero; Alamos Gold en Sonora; Vista Gold en Baja California Sur; Continnum Resosurces en Oaxaca, Linea Gold Corp en Chiapas y Oaxaca; Gold Group en Veracruz; Almaden Minerals en Puebla; Fortuna Silver en Oaxaca; Araganout Gold en Baja

California; Excellon en Durango; First Majestic Silver Corp en Coahuila y Zacatecas; Gabfer en Colima y Samalayuca en Chihuahua.

Según el informe “El impacto de la minería canadiense en América Latina y la responsabilidad de Canadá”, las actividades mineras propician el despojo y desplazamiento forzado de los legítimos propietarios mexicanos y cuando estos intentan defender sus derechos, las propias empresas los niegan de manera directa o a través de sus estructuras de fuerza ilegales.

En Zacatecas grupos ambientalistas responsabilizan a la compañía Goldcorp de contaminar los mantos freáticos y de afectar la vida silvestre por sus actividades en la mina Peñasquito. Y eso es un asunto de tantos de la contaminación que las mineras canadienses están provocando en todo el territorio nacional.

Pero es mejor tomarnos una selfie con Trudeau, que lo demás no tiene importancia.

Cuando se ha salido del círculo de errores y de ilusiones en el interior
del cual se desarrollan los actos, tomar posición es casi imposible.
Se necesita un mínimo de estupidez para todo, para afirmar e incluso para negar.

Emil Cioran

Por Octaviano Lozano Tinoco

Con el energúmeno que se tiene regenteando la Casa Blanca, como un verdadero antro visceral y criminal, donde la política y la diplomacia ha desaparecido, y el imperio estadounidense tal y como es, todo indica que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), suscrito por México, Canadá y Estados Unidos, se vaya al bote de la basura.

Por más que el gobierno de nuestro país se ha puesto de rodillas y ha intentado ponerlo a saldo, las baladronadas del presidente Donald

Trump echan por tierra cualquier intento de reforma, pese que llevan varias semanas negociando un nuevo pacto.

Lo bueno de ese derrumbe es que con el fin del acuerdo económico se iría para siempre el nefasto legado del expresidente Carlos Salinas de Gortari, en cuyo sexenio se suscribió dicho pacto, y lo malo es que el país ha fincado su desarrollo como cabús en el ferrocarril económico del país de las barras y estrellas. Y ahora sin su motor, nos quedamos como el niño abandonado en un gran centro comercial.

Trump ha dicho que está abierto a un acuerdo con Canadá, sin México, si las conversaciones del TLCAN entre los tres países no prosperan.

“Es posible que no podamos llegar a un acuerdo con uno o con otro, pero llegaremos a un acuerdo con uno”, ha señalado.

El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, ha señalado que sigue creyendo en el TLCAN, pero, aclara, que estamos “preparados para que pase cualquier cosa, y vamos a seguir trabajando con diligencia para proteger los intereses de Canadá”.

El joven Trudeau ha hecho saber a Estados Unidos su disposición de seguir entre ellos el acuerdo y dejar de lado a México.

El gobierno de Enrique Peña Nieto, por su parte, ha dejado claro que se prepara para lo peor. Lo que no podemos perder es que un TLCAN deje de ser de libre comercio, dijo el martes en el Senado el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray.

“Hay que estar preparados, por tanto, a decir que no y, si es necesario, a levantarnos de la mesa y si es necesario, incluso, a salirnos del tratado”, manifestó.

Advirtió que el fin del TLCAN podría marcar un punto de quiebre en las relaciones entre Estados Unidos y México, lo que afectaría la cooperación en áreas no relacionadas con el comercio.

Ojalá que todo esto sirva para que México creciera y no viera a Estados Unidos con la mirara baja; sino como lo que somos, un gran país que debe recobrar su dignidad y caminar erguido. Debemos buscar otros caminos y aliados

Y hoy el noble y el villano,el prohombre y el gusano
bailan y se dan la mano sin importarles la facha.
Joan Manuel Serrat

Por Octaviano Lozano Tinoco

La forma siniestra en que se hace política en México, donde puede pasar de todo, pero no se debe quitar la corrupción y la impunidad que le dan cohesión y movilidad al sistema, nos enfrenta en las primeras planas de los diarios con 16 exgobernadores relacionados con problemas de justicia y 17 candidatos independientes se alistan para inscribirse en el Instituto Nacional Electoral (INE) para disputar la presidencia de México en las elecciones del próximo año.

Al show de los gobernadores presos, se sumó Eugenio Hernández Flores, exgobernador de Tamaulipas, detenido por los delitos de peculado y operaciones de procedencia ilícita.

Ahora como los demás de sus “colegas” en proceso como son Javier Duarte, exgobernador de Veracruz, del PRI; Guillermo Padrés, de Chihuahua y del PAN; o Andrés Granier, de Tabasco, otro priísta, entre varios más, lo que debe hacer es “aguantar” porque con el paso del tiempo todo se olvida.

¿Quién sigue el caso de Duarte? Ya no interesa a la prensa y después de soportar horas de televisión y líneas de tinta en la prensa, en estos momento sus el silencio cómplice del olvido, de seguro lo exonerará y la corrupción e impunidad seguirá tan campante y no será desmantelada.

En esa suerte de surrealismo mexicano los candidatos independientes aparecen como pasto, para desviar la atención y hacer que ganen los de siempre; es decir, el PRI en la elección presidencial del 2018.

Reportes de prensa han señalado que durante la última semana de septiembre y la primera de octubre, se han registrado 17 aspirantes a la Presidencia por la vía independiente.

Sobresalen los nombres de Jaime Rodríguez, quien ayer entregó su registro como aspirante, al igual que la Zapatista Marichuy, Pedro Ferriz de Con y Armando Ríos Piter.

Entre los 17 registrados se encuentran: Alfredo Pérez Mata, quien se registró como aspirante independientes el 12 de septiembre; Francisco Gerardo Becerra, el 25 de septiembre y Pedro Ferriz de Con, el 27 de septiembre.

Asimismo, Alfonso Trujano Sánchez, Wendolin Gutiérrez Mejía y Héctor Luis Javalois Loranca, hicieron lo propio el pasado 28 de septiembre.

Por su parte, Edgar Ulises Portillo Figueroa se registró el 2 de octubre; Roque López Mendoza, el 3 de octubre, Carlos Antonio Mimenza Novelo; Armando Ríos Piter y José Francisco Flores Carballido el 4 de octubre.

Otros de los aspirantes independientes registrados a la Presidencia de la República son Simón Pérez Torres, el pasado 5 de octubre; Mauricio Ávila Medina, Eustacio Salinas Treviño y Esteban Ruiz Ponce, el 6 de octubre.

Los últimos registros hasta ayer fueron por parte de María de Jesús Patricio Martínez, Marichuy y Jaime Rodríguez, El Bronco.

Aunque se recorrió la fecha para el cierre de los registros para aspirantes independientes a algún escaño en las cámaras de Diputados y Senadores, o para la Presidencia de la Republica, que será hasta el sábado 14, se espera que Margarita Zavala sea la siguiente en

registrarse como independiente rumbo a Los Pinos en 2018.

Y así es la historia del país, que para que funcione se debe desmontar el sistema de corrupción e impunidad que gobierna este país. Lo demás es espectáculo.

La libertad de expresión es decir lo que la gente no quiere oír.
George Orwell

Por Octaviano Lozano Tinoco

En México la vida azarosa de los que trabajan como periodistas enfrentan tres hechos trágicos: puede morirse de hambre, por los bajos salarios, de un tiro en la cabeza disparado por sectores criminales, como desgraciadamente lo hemos visto en distintos puntos del país, o ser despedidos por los dueños de los medios que siguiendo con el lema del expresidente José López Portillo, “no pago para que me peguen”, quien se enfureció cuando leyó las notas de prensa y decidió suspender la publicidad oficial.

De estas tres tragedias que viven los periodistas, la tercera le acaba de ocurrir al periodista Leonardo Curzio quien presentó su renuncia a la primera emisión de Enfoque Noticias, en donde era Director de Noticiarios, porque los directivos de la empresa del Núcleo Radio Mil le habían pedido la “cabeza” de sus colaboradores María Amparo Casar y Ricardo Raphael.

Aunque Curzio salió ante la prensa a decir que “no fue cesado” sino que él presentó su renuncia ante el pedido del dueño de la estación, Edilberto Huesca Perrotin, de que corriera a dos de sus periodistas.

El comunicador y analista político señaló en entrevistas de radio que se negó a quitar “La Tertulia”, una mesa de análisis que realizaba cada jueves junto a Raphael, de CIDE, y Casar, de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, como se lo había pedido el dueño de la empresa.

Es claro que Curzio matiza la afrenta y no quiere hacer un “caldo gordo” sobre el asunto, que es claramente un grave golpe a la libertad de expresión.

Sabe que pelearse con los dueños de los medios, le cerrarían de plano cualquier micrófono y bueno está ahora en la banca esperando otra oportunidad.

Es de conocer que el episodio vivido por la periodista Carmen Aristegui, quien enfrentó directamente a los dueños de Grupo MVS quienes la despidieron argumentado de la pérdida de confianza “al haber comprometido el nombre de MVS, sin contar con facultades para ello y sin haberlo consultado previamente con la administración de la empresa”.

No le importó al dueño de MVS, Joaquín Vargas Guajardo, que el espacio conducido de Aristegui se ubicaba entre los tres programas de radio con mayores audiencias, con un rating de 0.81, sólo superada por el 0.99 de Ciro Gómez Leyva y 0.83 de Joaquín López Dóriga en Radio Fórmula, de acuerdo con datos de Investigación de Mercados INRA.

Pese al éxito de la fórmula de noticias de Aristegui, cuyo equipo develó al público la llamada “Casa Blanca” de la familia Peña Nieto, que la empresa constructora Higa propiamente le obsequió como pago de los contratos entregados por el gobierno, la periodista estuvo mucho tiempo en la sombra hasta que por fin pudo regresar con otro programa de radio que se transmite por internet.

Estos dos botones de muestra nos dejan ver claramente que los dueños de los medios no les interesa la libertada de prensa, lo que ellos buscan es, desde esa trinchera, defender sus intereses de grupo y ampliar sus negocios.

La mayoría de las veces los usan como vías para el chantaje, cuando tiene problemas con el gobierno y su grupo intenta lograr un contrato presionan o seden en ciertas noticias.

Si los grandes empresarios de los medios de información de verdad les interesara la democracia, el respeto a los derechos humanos, el fin de la corrupción y la impunidad, México desde hace mucho tiempo fuera otra nación. Sin embargo, no es así.

Se ha apoderado de nosotros
algo tan triste que nos deja sin aliento
Y ni siquiera podemos llorar.

Charles Bukowski

Por Octaviano Lozano Tinoco

Una vez que la tierra se detuvo y el gobierno empezaba a retirar a la gente de los escombros para ocuparse ellos de la tragedia ocasionada por los terremotos, se abrió una oportunidad y puso en marcha en el sur del país las Zonas Económicas Especiales (ZEE), que serán otro cataclismo para los pueblos de la región.

La primera declaratoria de ZEE será para los puertos de Chiapas, Lázaro Cárdenas y Coatzacoalcos. En el primero abarcará los municipios de Tapachula, Tuxtla Chico, Suchiate, Huehuetán, Mazatán, Frontera Hidalgo y Metapa, que cuentan con 513 mil 191 habitantes y una superficie neta de ocho mil 216.51 hectáreas, de las cuales 522 son predio federal,

El de puerto de Lázaro Cárdenas, Michoacán, con 360 hectáreas de este municipio, así como los de La Unión y Zihuatanejo, en Guerrero, con 334 mil 441 habitantes y una superficie neta de cinco mil 451.77 hectáreas, en donde la vocación productiva engloba

los sectores agroindustrial, automotriz, metalmecánica y siderurgia.

En Coatzacoalcos, Veracruz, el área de influencia es de 260 hectáreas en nueve municipios: Coatzacoalcos, Nanchital, Ixhuatlán, Minatitlán, Cosoleacaque, Osteapan, Chinameca, Jáltipan y Zaragoza, con 737 mil 405 habitantes y una superficie neta de ocho mil 263 hectáreas, en donde la vocación productiva abarca los sectores petroquímico, plástico, químico, metalmecánico, muebles, papel, aluminio y agroindustrial.

Una vez que las declaratorias sean publicadas, se espera concretar proyectos que podrían crear más de ocho mil empleos con inversiones cercanas a los dos mil 100 millones de dólares en las ZEE, donde no habrá impuestos sobre venta ni renta, por lo que los empresarios que ahí se localicen tendrán las manos libres para hacer lo que les venga en gana, solo con pagarles el mínimo a los que les trabajen en sus grandes proyectos.

Aquí es el asunto es que los pueblos podrían entrar en conflicto con los dueños del dinero, que intentarán

usufructuar sus riquezas naturales, solo pagándoles un sueldo por su trabajo.

La ZEE nos traerá a la época colonial en México y al porfiriato donde había en la haciendas los llamados peones acasillados y esos campesinos realizaban trabajos propiamente de esclavos.

Las ventajas competitivas que las ZEE ofrecen para el desarrollo de las regiones deprimidas es de "un costo de mano de obra un 48% menor que en el norte del país y un 36% menor en el costo de tierras".

Hay que ver cómo se entrega la soberanía de grandes territorios de México al gran capital, con la promesa de crear riqueza sin importante el costo y con la mano de obra barato de los pobladores.